El portavoz del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), Basem Naim, ha descartado este martes dialogar con las autoridades israelíes ante la continuada "guerra de exterminación y hambre" desatada contra la población de la Franja de Gaza, por lo que ha asegurado que es un "sinsentido" intentar hablar de la liberación de los rehenes que quedan secuestrados en el enclave palestino.
Naim ha indicado que cualquier negociación para un alto el fuego "carece ahora mismo de sentido" dada la política israelí impuesta contra Gaza, por lo que ha instado a la comunidad internacional a ejercer una mayor presión contar el Gobierno de Israel para "detener el hambre".
En este sentido, ha hecho hincapié en la importancia de ejercer presión sobre el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, especialmente desde las instituciones de Naciones Unidas. "Hay que tomar medidas urgentemente para entregar ayuda en Gaza a mediad que el hambre avanza", ha aseverado, según declaraciones recogidas por el diario 'Filastin', afín a Hamás.
Sus palabras llegan después de que el gabinete de seguridad israelí aprobara el lunes la expansión de las actividades armadas en el enclave bajo la premisa de "conquistar Gaza y retener los territorios".
El plan, que prevé la expansión de las operaciones militares israelíes y que ha presentado por el jefe de las Fuerzas de Defensa (FDI), Eyal Zamir, plantea el desplazamiento de la población gazatí hacia el sur y medidas para evitar que Hamás pueda controlar la ayuda.
Israel rompió de manera unilateral a mediados de marzo el alto el fuego pactado con Hamás, lo que se tradujo en la reactivación de la ofensiva y en un bloqueo humanitario condenado ampliamente por las organizaciones internacionales.