El alcalde de Trebujena, Manuel Cárdenas (IU), consideró ayer una “burla y una tomadura de pelo” de la Junta de Andalucía al sector de los riacheros el que se haya reunido con los alcaldes de las poblaciones de los afectados y no convocara a ningún representante del colectivo, al que “se ha estado dando largas desde hace varios meses para no oír sus planteamientos”.

El Ayuntamiento de Trebujena manifestó que la Junta “cierra las puertas a un posible diálogo con los riacheros y no plantea ningún tipo de indemnizaciones por cese de actividad de los mismos cuando se firme la moratoria por diez años de pesca de angulas en el río Guadalquivir”.

A juicio de Cárdenas, eso es lo que se desprende de la reunión mantenida el pasado jueves entre el viceconsejero de Gobernación, José Antonio Gómez Periñán, y los alcaldes de los municipios con riacheros afectados.

Asimismo, manifestó que la actitud de la Junta, “supone una indecencia política”, ya que “no tiene más pretensiones que acabar con la actividad de la pesca de la angula en el Guadalquivir, no existiendo ninguna predisposición al diálogo ni a un planteamiento alternativo al cese de la actividad pesquera”.

El alcalde de Trebujena mostró su “más rotunda repulsa” ante este modo de proceder de la Junta, ya que recordó que el pasado 8 de junio, el delegado del Gobierno de la Junta, Gabriel Almagro, mostró a los riacheros su “predisposición a mediar” para buscar soluciones a la regulación de la pesca de la angula en el río, lo que hizo albergar algunas esperanzas.

Cárdenas manifestó que no entiende el proceder de la Junta ante este problema, ni la “incomprensión”, “dejadez” y “situación de abandono” en la que se deja al colectivo.