En la mañana de hoy, lunes, ha comenzado oficialmente la campaña de pesca del atún rojo para el sector almadrabero, con la primera 'levantá' de la almadraba Punta Atalaya de Conil, agrupada en la OPP51 junto a Zahara y Tarifa. Un total de 129 ejemplares de atunes rojos salvajes han sido descargados en el Puerto de Barbate y ronqueados (técnica de despiece artesanal) para su venta en fresco y ultracongelado a -60 °C. La totalidad de estos atunes será comercializada en exclusiva por la marca Gadira, tanto en sus tiendas físicas de Barbate y Conil como a través de su canal de venta online (www.productosdealmadraba.com).
"La campaña de 2025 comienza marcada por la incertidumbre, en un contexto complejo como consecuencia de la huelga de inspectores de pesca, que afecta de lleno a nuestro sector, aunque se trate de un conflicto laboral que nos es completamente ajeno”. Así se ha pronunciado la directora gerente de la OPP51, Marta Crespo, quien ha querido dejar claro que “no tenemos nada que declarar sobre esta situación, más allá de manifestar nuestro absoluto respeto a todas las partes. Esperamos que puedan alcanzar un acuerdo lo antes posible, teniendo en cuenta que una resolución satisfactoria, pero sobre todo urgente, redundará en beneficio de todo el sector pesquero en general, y del almadrabero en particular”.
Desde la Organización de Productores Pesqueros OPP51, “nuestro único objetivo es poder desarrollar nuestra actividad con la normalidad que siempre ha caracterizado nuestras campañas, cumpliendo escrupulosamente con la normativa vigente, tanto la establecida por el ICCAT (Comisión Internacional para la Conservación del Atún Atlántico), como la de la Comisión Europea y, por supuesto, la de la Administración española”, añadió.
El sector almadrabero representa un modelo de pesca artesanal, sostenible y milenario, profundamente arraigado en la identidad cultural y económica del litoral gaditano. Se trata de un sector clave para la economía local de los municipios gaditanos, que genera empleo directo para unas 500 personas y alrededor de 6.000 indirectos. Es por ello que, “conscientes de este valor, confiamos en la buena disposición de las administraciones competentes para abordar la situación con celeridad”.
El atún rojo salvaje de almadraba es un símbolo gastronómico de Cádiz y Andalucía, un producto de excelencia gastronómica reconocido mundialmente, que sólo se pesca entre abril y junio, cuando pasan por las costas gaditanas. La labor que realizan los inspectores es fundamental para el control de la pesca, lo que hace que la trazabilidad de todo el proceso del atún rojo salvaje esté garantizada.
La temporada de 2025 ha comenzado no exenta de dificultades, como los temporales que han ralentizado los trabajos de calamento de los almadraberos en la mar, así como el dragado de emergencia de la bocana del puerto de Conil que, gracias a la rápida actuación de la Junta de Andalucía, ha permitido la normalización de la actividad de entrada de los barcos.
Estamos en un año importante para los productores pesqueros, ya que se celebra el ICCAT en Sevilla, en el que la almadraba aspira a que se aumente la cuota de pesca, “puesto que nos encontramos con un escenario propicio de recuperación de la especie, con una pesca controlada y que contribuye a la sostenibilidad del atún rojo salvaje”.