Jorge Rodríguez, coordinador general de IU en Cádiz, resta importancia a la ruptura de Sumar y Podemos en cuanto a sus consecuencias en el ámbito municipal. En las pasadas elecciones de mayo, las izquierdas ya concurrieron a las urnas de manera separada, salvo en alguna localidad como Rota. De manera que la crisis en Madrid no pilla por sorpresa al que fuera alcalde de Trebujena.
Pero considera que la formación morada debe hacérselo mirar porque, a diferencia del último mandato que sí apostó por la confluencia, en éste se ha quedado sin representación en los ayuntamientos.
Rodríguez apela a la reflexión porque considera necesario, por un lado, tener claro el objetivo: poner freno a la derecha y a la ultraderecha para conseguir gobiernos progresistas que fortalezcan la sanidad y la educación y fomenten el empleo de calidad y los derechos sociales. “Sin el frente amplio que supuso Sumar el 23J, hoy España tendría un vicepresidente de Vox”, advierte.
Por otra parte, pide tomar nota de lo que “la gente nos dice en la calle”. Sostiene que, desde el vecino de 18 años hasta el que tiene 70, está cansado, y así se lo transmite en cada localidad que visita, “de la falta de unidad de la izquierda”. “Tenemos que dejarnos de debates de puertas para dentro y tomar decisiones de puertas para afuera”, recomienda. Y finaliza con un mensaje conciliador y de esperanza.
“Aquí estamos con los brazos abiertos”, asegura. “En 2024 habrá elecciones en Galicia, País Vascos y para el Parlamento Europeo, hagamos lo que se nos demanda”, desea, insistiendo en que “el elector no puede sentirse traicionado otra vez”.