Según publica Ramón Roca en un artículo del Periódico de la Energía, “la costa de Barbate, Vejer de la Frontera y Conil de la Frontera es el sitio elegido por
Ferrovial para construir un megaparque de eólica marina”.
Un parque eólico que, aunque parezca una broma de mal gusto, se denomina Almadraba y tendría una capacidad de 495 MW, cuyos aerogeneradores se ubicarían frente al litoral entre Barbate y Conil, lugar de paso precisamente de los atunes rojos en su proceso de migración hacia el Mediterráneo. Es decir, en una de las zonas pesqueras más importantes de España.
Para dicho periódico “resulta extraño que tras haber aprobado y creado el Gobierno los espacios marinos para instalar eólica marina flotante, el grupo constructor haya elegido un sitio como este, fuera de los POEM, donde en principio no podría llevar a cabo dicho proyecto” aunque “también es cierto que se trata de una de las zonas más ventosas de todo el territorio nacional. Esa costa de Cádiz, cerca del Estrecho de Gibraltar, es una de las regiones con vientos más constantes”.
Cuestionada la empresa por dicho medio, la misma no se ha querido pronunciar, mientras que se insiste en que el actual Gobierno dejó fuera esa zona en su mapa eólico marino, con lo cual se prevé que su tramitación sea prácticamente imposible, aunque también es extraño que una empresa como Ferrovial lance ese proyecto sin que haya tenido en cuenta ese detalle.