La Fiscalía de Sevilla ha pedido una condena total de cinco años y cuatro meses de cárcel para Manel Comas por dos delitos de abuso sexual a dos menores discapacitadas cuando en 2008 era entrenador de equipo sevillano de baloncesto Cajasol, de la liga ACB.
El escrito de acusación del fiscal, al que ha tenido acceso Efe, imputa a Manel Comas dos delitos de abusos sexuales continuados y, junto a la pena de dos años y ocho meses de prisión por cada uno, pide que se adopten las medidas cautelares de rigor para garantizar sus futuras responsabilidades económicas.
Las dos menores de edad eran seguidoras del Cajasol y, según el escrito de la Fiscalía, sentían admiración hacia Comas, por lo que este "se granjeó su confianza" y abusó sexualmente de ellas "valiéndose de su condición de entrenador" y "a través de regalos y de cantidades de dinero".
Los hechos, según la Fiscalía, ocurrieron entre noviembre de 2005 y el 26 de noviembre de 2008, cuando fueron denunciados.
Este escrito de acusación se une al que ha presentado la acusación particular que ejercen los padres de las menores, quien ha pedido un total de nueve años de cárcel para el entrenador.
En este caso, la acusación añade la agravante de que el imputado atrajo a las chicas valiéndose de "su marginalidad socioeconómica y cultural".
Una de las víctimas era una chica "con discapacidad psíquica consistente en inteligencia límite" y la otra, de 15 años, "con retraso mental madurativo ligero".
El imputado "manipuló la voluntad de las mismas a través de regalos y pequeñas cantidades de dinero", y abusó de ellas en varias ocasiones mediante "tocamientos en el pecho por encima de la ropa, intentos y tocamiento en genitales, besos en la boca y tocamientos obligados por parte de la víctima en los genitales del imputado", respecto a la primera, según la acusación.
A la segunda chica le hizo "tocamientos en los pechos por encima y por debajo de la ropa, en nalgas por encima de la ropa y manipulación de órganos genitales".
La acusación cita entre las pruebas contra el acusado los mensajes que enviaba al móvil de las chicas, en uno de los cuales afirmó: "Como no me has dicho nada el domingo ya lo tengo ocupado con una amiga tuya 100 euros. Si quieres el lunes 200 para ti. Si quieres llama".
El abogado de la acusación solicita una indemnización de 20.000 euros para cada víctima por el daño moral y aplica al imputado la agravante de abuso de superioridad pues "se valió de su posición y la utilizó frente a la marginalidad y pobreza de las víctimas, su incultura" y su retraso mental.
El juicio por estos hechos se celebrará en los próximos meses en la Audiencia de Sevilla.
Al conocer la apertura de juicio contra él, Comas aseguró en un comunicado que los hechos denunciados "nunca han sucedido", por lo que mostró su "sorpresa" por la imputación.