El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V) llega al circuito francés de Le Mans con la intención de defender en el Gran Premio de Francia su posición de privilegio al frente de la clasificación provisional del mundial de MotoGP, si bien la mítica pista resulta muy del agrado de su más directo rival, el también español Jorge Lorenzo (Yamaha YZR M 1).
Márquez ha sido el autor de los mejores tiempos de entrenamientos en el circuito de Le Mans en las tres últimas ocasiones que ha estado allí, en realidad desde que ascendió a la categoría de MotoGP tras proclamarse campeón del mundo de Moto2 en 2012, si bien sólo en 2014 consiguió la victoria.
El piloto de Repsol Honda es uno de los pocos de la categoría y el único entre los aspirantes claros al título mundial de MotoGP en 2016 que ha logrado sumar puntos en todas las carreras y ese volverá a ser su objetivo en Le Mans, en donde su máximo rival debiera ser el vigente campeón del mundo, el español Jorge Lorenzo, que ha ganado en cuatro ocasiones en ese trazado.
Lorenzo fue el vencedor del último gran premio en Francia, además de en las ediciones de 2012, 2010 (temporadas en las que acabó proclamándose campeón del mundo) y 2009, por lo que es el piloto que más veces ha ganado en Le Mans, por delante del italiano Valentino Rossi (Yamaha YZR M 1), quien lo hizo en tres ocasiones (2008, 2005 y 2002).
Rossi llega a Le Mans con la moral por las nubes tras su victoria en el circuito andaluz de Jerez de la Frontera y ello le convierte por derecho propio, en uno de los aspirantes al triunfo en la carrera francesa, una prueba que suele tener un protagonista incómodo en la climatología, puesto que rara es la vez que la lluvia no altera en uno u otro momento el desarrollo de la competición.
El cuarto en discordia debe ser el segundo piloto del equipo Repsol Honda, Dani Pedrosa, vencedor de la carrera en 2013 y autor de cuatro vueltas rápidas de entrenamientos (2006, 2008, 2009 y 2012), que ocupa la cuarta plaza en la clasificación provisional del mundial precisamente tras sus rivales habituales, Marc Márquez, Jorge Lorenzo y Valentino Rossi.
Pero, además, el circuito más cinematográfico del panorama mundial junto a Indianápolis, será escenario de un nuevo paso para completar el "rompecabezas" de la temporada 2017, pues ya en Jerez de la Frontera los responsables de Yamaha, que pierden a su vigente campeón del mundo Jorge Lorenzo, que se va a Ducati, pusieron como fecha tope para que Maverick Viñales decida su futuro tras la carrera francesa.
Para Viñales es la primera opción para ocupar la plaza de Jorge Lorenzo en Yamaha, pero el piloto de Roses todavía no ha dicho desvelado cuál su futuro, que podría continuar vinculado a Suzuki si le garantizan un buen material, del que por ahora parece disponer, pues ocupa la sexta posición del mundial y tiene la cuarta plaza Austin como mejor resultado.
Delante de él en la clasificación se encuentra otro español, Pol Espargaró (Yamaha YZR M 1), que en Le Mans consiguió su mejor resultado como debutante al acabar cuarto tras ser segundo en los entrenamientos oficiales, un resultado que en 2016 se antoja harto complicado para el ex-campeón del mundo de Moto2 debido a la tremenda igualdad existente en la categoría salvo en lo que se refiere a los dos pilotos oficiales de Repsol Honda y de Yamaha.
La categoría de MotoGP está viviendo el momento "más dulce" para la representación española, pues entre los ocho pilotos de cabeza, salvo por lo que se refiere al italiano Valentino Rossi -tercero-, el resto de protagonistas es de esta nacionalidad y si se tiene en cuenta que desde 2011, cuando ganó el australiano Casey Stoner (Repsol Honda RC 211 V), las victorias en Le Mans han tenido protagonista español, las apuestas vuelven a apuntar en esa dirección en 2016.
Tras Pol Espargaró y Maverick Viñales se encuentran el también piloto de Suzuki, Aleix Espargaró, y el satélite de Ducati, Héctor Barberá, quien con la moto de 2014 está consiguiendo un excelente rendimiento en este inicio de campeonato.
Algo más atrás se encuentran Álvaro Bautista (Aprilia RS-GP) y Esteve "Tito" Rabat (Honda RC 213 V), quien por distintos motivos no logran estar al rendimiento esperado por ellos mismos y que si en el caso del de Talavera de la Reina se debe a cuestiones técnicas, a la espera de un nuevo motor que debe llegar en Mugello, más ligero y potente que el actual, en el del segundo la adaptación a la categoría está resultando más complicada de lo previsto.