La combinación del escolta hispano Devin Booker y el base español Ricky Rubio fue la clave que permitió a los Suns de Phoenix venir de atrás y ganar por 117-115 a los Mavericks de Dallas, a pesar de los 40 puntos que les aportó su estrella, el esloveno Luka Doncic.

Booker llegó a los 30 puntos como líder del ataque balanceado de los Suns, donde Rubio fue decisivo tanto en la dirección del juego como en los 20 tantos que anotó, además de quedarse cerca de un triple-doble.

Rubio, que jugó 32 minutos, anotó 7 de 17 tiros de campo, incluidos 2 de 3 triples, y estuvo perfecto desde la línea de personal (4-4).

El jugador de El Masnou también destacó dentro de la pintura al capturar nueve rebotes, incluidos siete defensivos, además de repartir siete asistencias, liderar el equipo, perder dos balones y cometer tres faltas personales.

Otros tres jugadores de los Suns acabaron con números de dos dígitos, encabezados por el ala-pívot novato Cameron Johnson, quien estableció sus mejores marcas profesionales con un doble-doble de 19 puntos, 12 rebotes -todos defensivos- y cuatro asistencias.

El ala-pívot reserva, el croata Dario Saric, volvió a ser el sexto jugador de los Suns al conseguir 13 puntos y ocho rebotes defensivos.

Aunque los Mavericks llegaron a tener más de 10 punto de ventaja en el marcador, al final no hicieron buena defensa, y eso les costó el partido, pero aseguraron el pase a los playoffs, por primera vez desde 2016, después de la derrota que sufrieron los Grizzlies de Memphis (116-118) ante los Spurs de San Antonio.

Los Suns han ganado dos partidos seguidos desde que se reanudó la competición, pero todavía están lejos del ansiado octavo puesto de la Conferencia Oeste que les daría opción de estar en los playoffs.

Doncic reivindicó su condición de líder de lo Mavericks al conseguir un doble-doble tras repartir 11 asistencias y también capturar ocho balones bajo los aros.

Pero el exjugador del Real Madrid no pudo nunca definir con las canastas decisivas, lo mismo que le pasó al pívot letón Kristaps Porzingis, quien acabó el partido con 30 puntos, ocho rebotes y cuatro tapones.

El base Seth Curry, quien anotó 16 puntos, estableció un récord de triples como profesional en una temporada al llegar a los 139 y superar los 137 que logró en la de 2016-2017, también la primera que estuvo con los Mavericks.