Los irlandeses parecen haber apostado por un gobierno de coalición entre el ganador de los comicios de este viernes, el conservador Fine Gael (FG).
Los irlandeses parecen haber apostado por un gobierno de coalición entre el ganador de los comicios de este viernes, el conservador Fine Gael (FG), y el Partido Laborista, después de que ambos lograsen en las urnas los mejores resultados de su historia.
Mientras prosiguió ayer el lento escrutinio de los votos, cuyo cómputo final se podría conocer hoy, las urnas han castigado duramente al gobernante Fianna Fáil (FF), que podría perder, según los sondeos, más de cincuenta
escaños respecto a las elecciones de 2007, cifra récord para la hasta ahora formación hegemónica irlandesa.
Tal es la magnitud de su descalabro electoral que Fianna Fáil podría quedarse finalmente sin diputados por las doce circunscripciones.