La guitarra española es un nexo musical entre la población inmigrante y la autóctona en Lepe gracias a una idea de un músico-terapeuta que cada tarde reúne a niños de varios países en torno a sus seis cuerdas.
Una idea que en su día tuvo la Fundación Cepaim con el fin de trabajar en la integración de los inmigrantes, pero usando métodos originales, y casi siempre con la música como telón de fondo.
En esta iniciativa participa activamente Paco Cordero, un músico-terapeuta que, guitarra en mano, se pone cada tarde ante un variopinto grupo de personas para transmitirles la necesidad de entender la inmigración como un aspecto beneficio por el aporte de culturas que supone.
Con este espíritu nació en su día este taller de guitarra, en el que no es necesario tener una guitarra para participar, ya que la organización proporciona los instrumentos.
Niños de varios países y personas mayores se mezclan, con la mirada atenta, en una actividad que tiene solo la limitación del espacio del local donde tiene lugar, el de la asociación de vecinos de la barriada de Blas Infante del municipio onubense, que es una de las que cuenta con una mayor población inmigrante en la localidad.
Todo ello dentro de los programas de la fundación denominados "FEI Barrios" y "Programa integral para la inclusión activa", que intenta pelear desde dentro mediante la dinamización comunitaria y la participación social en zonas de exclusión social.
Y es que, como explican sus responsables, la música es un lenguaje universal, y como se ha podido ver con la repercusión que ha tenido la muerte de Paco de Lucía, la guitarra flamenca española es uno de los mejores vehículos para trasladar esa música a los niños inmigrantes y sus vecinos autóctonos.
Todo ello se comprime en dos sesiones semanales, los miércoles y viernes de 20.00 a 21.00 horas, con el horizonte puesto en el 4 de julio próximo, cuando será clausurada esta idea tras medio año de trabajo intenso.
Con un temario amplio, los asistentes podrán conocer y experimentar con este instrumento musical, aprendiendo a tocar la guitarra desde sus propios gustos e intereses musicales, ya sea flamenco, rock, jazz e incluso clásica, pero siempre teniendo en cuenta el propio nivel de cada alumno para llevar a cabo su enseñanza.
No es la primera vez que la música se pone al servicio de la integración en esta barriada, ya que el mismo profesor encontró en su día en el carnaval una forma de integración, y lo hizo en forma de una chirigota, que este año ha participado de nuevo en la muestra local de carnaval.
A sus órdenes se pusieron niños que conviven en el día a día del barrio y que han nacido en España, Ecuador, Senegal y Marruecos, que se unieron en toro a su director para formar "Los Crú de Lepe", una parodia de la película Los Croods que contó con 15 componentes, y que se subió a las tablas del teatro municipal Alcalde Juan Manuel Santana para desarrollar un repertorio en el que la integración era la bandera.
Es el segundo año que se pone en marcha esta iniciativa, igual que el curso de guitarra por la integración también se repite, y en la mente de la fundación está seguir trabajando para que la inmigración siempre se vea en positivo, y se aproveche el aporte mutuo de cultura que supone un pueblo como Lepe, con 28.000 habitantes y personas de 63 países distintos en su seno.