El futuro del Club Balonmano Pedro Alonso Niño de Moguer sigue en el aire y lejos de aclararse continúa rodeado de niebla. Los socios del club amarillo estaban llamados este viernes a partir de las 20.00 horas a participar en las elecciones a una nueva junta directiva, pero tal y como se venía vislumbrando en los últimos días no ha comparecido ninguna candidatura.
Ante la situación de inmovilismo, la junta saliente que preside Teresa Ollero, que ha encabezado el club las dos últimas temporadas, ha decretado un periodo de reflexión de 48 horas por si alguna de las personas presentes que han mostrado su interés en colaborar pero no han querido asumir el papel de cabeza visible cambia de opinión.
Este es el plazo máximo impuesto por la junta, ya que el lunes hay que formalizar la inscripción del club en el grupo F de la Primera Nacional y si finalmente no hay un grupo de personas dispuestas a dar forma a un proyecto no se realizará dicha inscripción y el club caminará hacia su más que posible desaparición.
Teresa Ollero ha manifestado que “la situación sigue siendo alarmante y continuamos estando muy preocupados, pero por nuestra parte ya lo hemos dado todo y no podemos hacer más, así que si los socios quieren que el club siga más allá de los 43 años de vida que tiene alguien tiene que dar el paso al frente”.
Ollero ha indicado que está “más tranquila” tras una semana “muy mala” porque la asistencia a esta convocatoria ha sido superior a la asamblea de hace unos días. También ha valorado que varias personas “se hayan mostrado dispuestas a colaborar”, aunque ha recalcado que “si no se forma una nueva junta directiva poco más hay que hacer”.
Queda por tanto a expensas de que finalmente alguien dé el paso al frente entre la masa social del Pedro Alonso Niño para que el club albergue esperanzas de continuar adelante o de lo contrario pondrá fin a su andadura, pese a que su situación económica y deportiva es buena, como se ha vuelto a señalar en la reunió.