La velada de este viernes estará llena de magia y emociones para el público asistente a Tío Pepe Festival. El artista uruguayo Jorge Drexler llega hasta Jerez para interpretar sus canciones en un concierto único en el marco de la octava edición del Festival de González Byass. Las últimas entradas disponibles para esta actuación, que comenzará a las 23.15 horas, pueden adquirirse a través de la web Veranea en la Bodega. 

El músico, cantante, compositor y actor uruguayo aterrizará en el Patio de la Tonelería para presentar el que es su último trabajo discográfico de estudio 'Tinta y Tiempo' (2022). Drexler cuenta con una larga trayectoria vinculada a las artes y la música habiendo ofrecido conciertos por todo el mundo y contando con más de una decena de discos de estudio.

Médico de formación profesional, al igual que sus padres, decidió dejarlo todo en 1995 para venir a España (Madrid) y poder dedicarse plenamente a su mayor pasión: la música. Desde entonces son muchos los galardones que ha recibido, entre otros, Premio Oscar (2005 por la canción 'Al otro lado del río'), cinco Latin Grammy´s (2014, 2018) y una Biznaga de Plata. 

Cuenta con un estilo muy personal de cantar, un sello inconfundible, considerado por muchos como un artesano de la música que maneja las emociones con sensibilidad y elegancia o, como a él mismo le gusta autodefinirse, un “cancionista” que proporciona felicidad a todos los que le escuchan. 

Para hacer disfrutar al público, el cantante ofrecerá un concierto donde interpretará tanto sus nuevas canciones como otras de discos anteriores. En el escenario estará acompañado por una magnífica banda compuesta por Borja Barrueta (batería), Meritxell Neddemann (teclados y voces), Javier Calequi (guitarra y voces), Carle “Campi” Campón (bajo y programaciones), Alana Sinkëy y Myriam Latrece (voces). Y todo ello sucederá en un entorno inconfundible como es el Patio de la Tonelería de Bodegas Tío Pepe, ubicadas en el centro de la ciudad jerezana, donde se dará una conjunción perfecta entre la belleza del patrimonio arquitectónico que rodea las impresionantes bodegas, el olor al mejor vino y la buena música.