Si nada se tuerce a última hora, como ya ocurrió hace dos meses, los Reyes Magos traerán a los vecinos del bloque número 6 de la calle Desconsuelo, en la barriada de La Asunción, así como a otras familias de La Vid y La Constancia, las ansiadas obras de rehabilitación después de años de espera y conviviendo entre puntales. El comienzo de los trabajos está previsto para este martes, junto con la visita previa del propio delegado territorial de Fomento, Vivienda, Turismo y Comercio, Manuel Cárdenas, a los distintos bloques antes de las actuaciones.


En el caso de las cinco familias de La Asunción, una vez que empiece la obra, que con casi toda seguridad será esa misma mañana, tendrán que abandonar sus inmuebles de cinco a veinte días, que es el plazo que les ha dado el contratista. “Nos ha dicho que en la fase de demolición de la cubierta no podemos estar allí, igual podemos regresar a los seis días que a los quince”, explica la portavoz de los afectados, Lorena Velarde.

Pese a las molestias obvias, siempre que vean llegar a los obreros el trasladarse a casas de otros familiares no les supondrá ningún problema porque significará que la salida del túnel tras seis años está próxima. El plazo estimado para la totalidad de las obras es mes y medio, y después de este edificio, cuyas dos últimas plantas están apuntaladas, le tocará el turno a otro bloque de la calle Albadalejo de este barrio. De los 37.000 euros en los que está presupuestada la obra, la Junta ha financiado el 95 por ciento, mientras que el 5 por ciento restante (1.800 euros)  corre a cargo de la comunidad de vecinos. “Para nosotros es el mejor regalo de Reyes”, sentencia Velarde.