Entre datos y delirios: ¿estamos preparados para usar IA?

Publicado: 01/07/2025
Autor

Nertis

La sociedad, la política o la justicia desde el punto de vista de los miembros del despacho Nertis Legal

La Tribuna de Nertis

Los distintos profesionales del despacho Nertis Legal analizan en cada artículo la realidad social

VISITAR BLOG
Rosario Álvarez Jiménez, abogada de Nertis ETL Global, nos habla de la Inteligencia Artificial y de los retos que plantea
Vivimos en la era del "lo vi en ChatGPT, así que debe ser cierto" “me lo hizo ChatGPT, así que debe estar bien”. Y no, no es oro todo lo que reluce, ni todo lo que genera una IA es verdad o es seguro. La inteligencia artificial ha irrumpido en nuestras vidas como un vendaval tecnológico, y ChatGPT, en particular, se ha convertido en el nuevo oráculo moderno. Pero ojo: un oráculo sin contexto puede ser más peligroso que útil.

Porque, como dice el refrán, "el que mucho abarca, poco aprieta". Y eso aplica tanto a la IA como a sus usuarios. La IA no es mágica, ni infalible, ni ética por sí sola. Depende de quién la use y cómo. Por eso, la alfabetización digital se vuelve urgente: no podemos seguir lanzando preguntas a ChatGPT como si fuera un sabio infalible, y menos aún si no sabemos distinguir entre una buena respuesta y una alucinación algorítmica.

Los riesgos son serios: por un lado, la privacidad: ¿sabían que muchas personas comparten datos personales con estos sistemassin saber que podrían ser almacenados o sin saber para qué van a ser usados?Por otro lado, las llamadas “alucinaciones” ¿sabían que la IA puede inventar leyes, citar sentencias inexistentes o atribuir delitos que ni en las peores pesadillas se hancometido? Y lo hace con una seguridad que haría sonrojar a cualquier jurista.

Quienes nos hemos formado en derecho digital, lo decimos claro: sin una base mínima de conocimiento, el uso de herramientas como ChatGPT puede vulnerar derechos fundamentales. ¿Privacidad? En juego. ¿Veracidad de la información? Comprometida. ¿Responsabilidad? Difusa.

Por eso, no se trata de prohibir, sino de formar. Así como no dejamos que cualquiera conduzca sin pasar por una autoescuela, tampoco deberíamos promover el uso masivo de IA sin una mínima “autoescuela digital”. Al igual que nadie debería conducir un coche sin saber lo que hace el freno, tampoco deberíamos usar IA sin saber cómo funciona, qué limitaciones tiene o qué implicaciones legales conlleva.

Y no, no se trata de demonizar la tecnología. Se trata de democratizar su comprensión.

Alfabetizar sobre inteligencia artificial no es opcional, es una necesidad de interés general. Porque si no enseñamos a usar estas herramientas, acabaremos siendo usados por ellas.Porque en el mundo digital, la ignorancia no solo no exime de responsabilidad… puede incluso multiplicarla.

El desconocimiento digital es el nuevo riesgo jurídico.

© Copyright 2025 Andalucía Información