El presidente fundador del PP, Manuel Fraga, atribuyó ayer la polémica surgida a raíz de sus declaraciones sobre los partidos nacionalistas a una “interpretación torcida”, y subrayó que él no habló “de colgar a nadie” sino de ponderar el peso de los nacionalistas en el Parlamento.

En declaraciones a los medios de comunicación antes de asistir a la conferencia que pronunció ayer el vicepresidente de la Xunta, el nacionalista Anxo Quintana, Fraga se refirió así a las críticas que ha recibido por las afirmaciones en las que señalaba que habría que ponderar el peso de los partidos nacionalistas “colgándolos de algún sitio”.

Para el senador del PP, la polémica “no tiene fundamento ninguno”, hizo hincapié en que hizo un discurso en el que estaba medida “cada palabra” y en que luego contestó durante media hora a ochenta preguntas, “algunas con la posibilidad de que surgiera alguna interpretación torcida”.

“Yo no hablé de colgar a nadie, sino de sopesar... Me preguntaron cómo ponderar, ponderar es pesar, bueno pues dependerá de cómo exprese usted -esas declaraciones-, eso es lo que yo dije”, recalcó el veterano político gallego.

Preguntado sobre si considera que sus palabras fueron desafortunadas, Manuel Fraga respondió: “Si usted tuviera que contestar cincuenta preguntas en 50 minutos, me gustaría ver cómo saldría usted...”.

Fraga asistió, como hace habitualmente con todos los políticos gallegos, a la conferencia de Anxo Quintana titulada “Nuevos tiempos para el autogobierno de Galicia”, organizada por Nueva Economía Fórum.

La presencia de Fraga, que compartió mesa con numerosos políticos nacionalistas, despertó gran interés a raíz de las declaraciones que realizó la semana pasada.