El joven turco de 19 años de edad que se encontraba en estado crítico tras ser agredido el 2 de junio por un grupo de personas no identificadas durante una manifestación antigubernamental en la localidad de Eskisehir ha fallecido este miércoles tras no poder superar la gravedad de sus heridas.
El joven, Alí Ismail Korkmaz, intentaba escapar de una carga policial con gases lacrimógenos cuando fue asaltado y agredido por un grupo de personas vestidas de civil. Ninguno de los responsables del suceso ha sido arrestado hasta el momento, según ha informado el diario turco 'Hurriyet'.
Korkmaz se convierte así en el quinto manifestante fallecido en el marco de las protestas contra el Gobierno del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan. Al balance de víctimas hay que sumar la muerte de un policía que cayó por un puente cuando perseguía a varios manifestantes en la ciudad de Adana.
La ola de protestas se inició a raíz del anuncio de la construcción de un centro comercial que evoca los cuarteles militares del Imperio Otomano en el parque Gezi.
Alrededor de 2,5 millones de personas salieron a las calles de 79 ciudades turcas en las tres semanas de protestas. Las más multitudinarias se celebraron en Estambul y en Ankara, según el recuento elaborado por el ministerio. Solo las ciudades de Bayburt y Bingol no fueron escenario de ninguna protesta.
Los críticos acusan al Gobierno que lidera Erdogan de ser el causante de los problemas que sufre estos días el país por haber arremetido contra los manifestantes en los primeros días de movilizaciones y por haber intentado vincularlos con el terrorismo.
La Policía empleó gases lacrimógenos y cañones de agua para dispersar a los manifestantes, lo que provocó que las protestas derivaran en enfrentamientos y, posteriormente, se extendieran a otras ciudades.