El travieso Pepino, uno de los personajes más emblemáticos del carnaval de La Paz, "revivió" este domingo en medio de bailes, música y mucha alegría
El travieso Pepino, uno de los personajes más emblemáticos del carnaval de La Paz, "revivió" este domingo en medio de bailes, música y mucha alegría para dar inicio a las actividades carnavaleras.
Como todos los años, decenas de personas llegaron hasta el Cementerio General de La Paz, en la populosa zona Garita de Lima, para llevar el colorido ataúd del picaresco Pepino en una procesión por las calles aledañas al son de una marcha fúnebre.
El cortejo fue encabezado por el gobernador de La Paz, Félix Patzi; el secretario municipal de Culturas, Andrés Zaratti, y el viceministro de Interculturalidad, Óscar García.
Al llegar al escenario central, el Ch'uta y la cholita, otros de los personajes tradicionales del Carnaval paceño, abrieron el ataúd y realizaron un sahumerio para que el Pepino "vuelva a la vida" y que irradie su alegría a la población.
Un beso fue lo que despertó al picaresco personaje que salió de su ataúd rojo con imágenes de globos de colores dando saltos y bailando en medio de la mixtura o papeles de colores, mientras la banda tocaba música tradicional del Carnaval paceño.
"El Pepino es la identidad del Carnaval paceño; desde hoy comienzan las fiestas y cuando el Pepino está suelto, todo el Carnaval empieza", comentó García.
Vestido de rojo y verde, los colores de la bandera de La Paz, el inquieto Pepino recibió de las manos del gobernador paceño la "llave amarilla de la alegría" para que contagie su picardía.
Zaratti también le entregó al Pepino otras llaves para que "tome las calles" paceñas.
Luego decenas de comparsas de Ch'utas, cholitas y pepinos que acompañaron este acto hicieron su paso por las calles aledañas.
El Pepino representa la picardía, la alegría y el desenfreno característicos del carnaval, mientras que el Ch'uta y la Cholita introducen costumbres aimaras en la fiesta, como el agradecimiento a la "Pachamama" o Madre Tierra por sus frutos, una tradición arraigada en el occidente.
Entre las actividades en torno al carnaval que prevé la Alcaldía de La Paz está la elección de la reina y los representantes de los personajes de esta festividad, además de conciertos, serenatas, exposiciones y el Corso Infantil donde los niños se disfrazan y salen a las calles.
También está el Jiska Anata (fiesta pequeña) en el que cientos de personas recorren las calles paceñas bailando danzas tradicionales.