La Guardia Civil de Pinos Puente (Granada) ha puesto a disposición judicial en calidad de imputados no detenidos a dos hombres de 29 y 33 años, los cuales se presentaban como instalaciones de gas, como presuntos autores de un delito de estafa tras cobrar a una anciana mil euros por una pieza que costaba siete.
Los dos imputados ya habían estado antes en el domicilio de la víctima, una mujer de 83 años, y tras presentarse como instaladores del gas acreditados revisaron la cocina y el calentador de agua y le cobraron 350 euros sin factura. La anciana no tenía entonces suficiente dinero en casa y les dejó a deber cien euros.
Estos volvieron a la casa el pasado día 21 de agosto a cobrar el dinero que les adeudaba y aprovecharon la ocasión para instalarle un detector de monóxido de carbono que en el mercado vale siete euros y le cobraron mil euros.
La anciana decidió acudir entonces al Puesto de la Guardia Civil de Pinos Puente y denunciar estos hechos porque se sentía engañada por los instaladores, y porque además no habían querido darle una factura.
La Guardia Civil de Pinos Puente consiguió localizar la empresa en la que trabajaban estos dos instaladores e identificar e imputar a ambos. Los agentes también han averiguado que ninguno de los dos está acreditado como instalador autorizado por la Consejería de Economía, Innovación, Ciencia y Empleo de la Junta de Andalucía.
Esta actuación se enmarca dentro del Plan Mayor de Seguridad, con el que la Guardia Civil intenta prevenir las principales amenazas que afectan a la seguridad de las personas mayores, como son el maltrato, los robos, y las estafas como la que se da en los hechos narrados.