María Jesús Sierra Barroso y José Morales Cruz contrajeron matrimonio en la iglesia vaticana castrense de San Francisco al mediodía de este sábado, apadrinados por el padre de la novia, el oficial de Infantería de Marina Juan Sierra Valle y por la madre del novio, Joaquina Cruz Criado. El párroco de San Francisco, Gonzalo Núñez del Castillo, pronunció la frase definitiva: "Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre".
Para los que no estén al tanto del deporte del atletismo busquen en Google el nombre de la isleña María Jesús Sierra (lo de isleña no hace falta ponerlo) y saldrán cientos de páginas de los principales diarios deportivos calificándola como la reina del Iberman, el triatlón en el que se desarrolla como pez en el agua.
Lo más curioso es que María comenzó jugando al balonmano pero una lesión le impidió seguir practicándolo. No obstante, la lesión le impedía los giros de rodilla de ese deporte, pero correr, por lo que comenzó una nueva andadura que la llevó a una de las especialidades más exigentes. Correr, nadar y pedalear.
José Morales también es atleta de triatlón y se conocieron precisamente en el club en la que corre la isleña, el de Mijas, donde vive María por motivos de trabajo. Y este periódico, que ya le hizo su primera entrevista hace una veintena de años de la mano de Gaby Cumbreras cuando jugaba al balonmano y la entrevistó el arriba firmante en primer lugar hace un año, tuvo la oportunidad de entrevistarla tras la boda, en la misma iglesia y antes de que cruzara una meta que no era una meta, sino un comienzo.
Buena temporada
En el apartado deportivo, la atleta isleña ha completado un verano de auténtico ensueño consolidándose, a sus 35 años, como todo un referente dentro del tritalón andaluz, nacional y de más allá de las fronteras.
Entre sus últimos logros, cabe resaltar la medalla de oro conseguida el pasado 24 de agosto con el Trialándalus Mijas en Posadas (Córdoba) en los Campeonatos de Andalucía de media distancia y sprint. María Jesús Sierra superó las dificultades que tuvo en las revueltas aguas del pantano de La Breña, mostrando todo su potencial en la prueba de bicicleta y posteriormente en la carrera a pie de 21 kilómetros, sumando un nuevo metal del más alto valor a su palmarés.
Pero, sin lugar a dudas, su mayor éxito llegó el pasado mes de junio cuando se proclamó vencedora del II Iberman Triatlón Laga Distancia, I Iberman Eurociudad del Guadiana que se celebró en diferentes localidades de la provincia de Huelva y del Algarve portugués.
La triatleta isleña marcó un tiempo de 11 horas, 52 minutos y 38 segundo en la meta situada en la localidad portuguesa de Vila Real de Santo Antonio, donde no solo tuvo que enfrentarse a la dureza de la prueba, sino también a las altas temperaturas. Aventajó a la segunda clasificada, María del Carmen Peralta, en 19 minutos y a la tercera en 48 minutos, que fue Gabriela Vieiter.
Pese a que durante las últimas semanas ha estado bastante ocupada con los preparativos de su enlace matrimonial, no ha parado de entrenarse con la vista puesta en una cita trascendental para ella: el mes de noviembre en México. Será allí donde tratará de sacarse el pasaporte para la cita mundialista que cada año se celebra en Hawai y que se desarrollaría en octubre de 2015.
Una cita que consiguió este año pero que perdió al llegar tarde al acto por un pinchazo en la rueda del coche. "Pero lo volveré a intentar y lo conseguiré en México", dijo vestida de novia.