La
factura de Endesa no llega y cuando llega, el
cargo se eleva a mil, 1.500 e incluso 2.000 euros y
no hay un perfil concreto de usuario afectado ni una zona donde se hayan localizado más incidencias. Las incidencias con las facturas de la compañía eléctrica
afectan a miles de usuarios en Sevilla, aunque el problema se extiende por todas las provincias, y ante la
persistencia del problema,
OCU vuelve a alertar de un problema que “
le puede tocar a cualquiera y en cualquier momento”, por lo que insta a los afectados a
fraccionar el pago y pedir la indemnización correspondiente.
“
Es un chorreo continuo desde 2020”, explica
José Carlos Cutiño, responsable de OCU Sevilla, y aunque Competencia abrió un expediente a Endesa, lo único que se sabe es que argumentó que
los cambios en los peajes y los impuestos provocaron “distorsiones en su sistema informático”, lo que afectó a un 1% de sus usuarios “pero
en Sevilla a miles, calcula cuántos se pueden ver afectados” por un problema por el que incluso
ya fue penalizada Endesa y que, de persistente que es, ya
se pone de ejemplo en las Juntas Arbitrales de Consumo como un “caso típico”.
Porque lo sorprendente es que
le puede tocar a cualquiera. “
No hay un perfil de afectado”, insiste Cutiño apuntando que al que le tocó hace dos años, no le ha vuelto a pasar, pero al que se libró, ahora no le llegan las facturas y cuando le llegan, es una cantidad desorbitada que no tiene, e
incluso aunque hayan cambiado de comercializadora, les puede pasar porque
es “en Endesa Distribución donde está el problema”. “No se termina, no hay explicación racional y mañana te puede tocar a ti”, explica.
Esta
situación “esotérica”, como la llegó a definir Cutiño, no sólo
perjudica al propio usuario afectado, apunta, sino
también a Endesa, que o bien
no cobra, o cuando se detecta y quiere cobrar,
si ha pasado un año, no puede exigir el abono más allá de doce meses, además de tener que afrontar las
refacturaciones, los prorrateos y las indemnizaciones.
Ante la persistencia del problema, OCU ha vuelto a ponerse en contacto con Endesa para comunicarle que los usuarios que se han puesto en contacto con el servicio de atención al cliente “
no obtienen una información detallada y clara sobre el retraso de la facturación”; y cuando al fin la reciben las
facturas atrasadas, “se llevan la desagradable sorpresa de que
la compañía eléctrica pretende cobrar todos los retrasos en un pago único”.
Pago fraccionado, desglose de la factura e indemnización
En esos casos, la organización de consumidores recuerda que
los consumidores tienen derecho a solicitar el pago fraccionado “en tantas facturas prorrateadas, como meses haya persistido el error, sin que ese aplazamiento
pueda exceder el periodo de un año ni incluir facturas con mayor antigüedad”.
Según la
Comisión Nacional de los Mercados y Competencia (CNMM), el
prorrateo deberá realizarse en ese modo, un extremo que ha puesto de manifiesto a través de
numerosos informes sobre facturación a los consumidores finales que, según lo previsto en el Real Decreto 1955/2000, de 1 de diciembre, por el que se regulan las actividades de transporte, distribución, comercialización y procedimientos de autorización de instalaciones de energía eléctrica.
La
comercializadora en estos casos, incide OCU, “deberá promover ante los usuarios afectados el
fraccionamiento de las facturas retrasadas, una vez tenga lo datos necesarios para facturar la
totalidad de las facturas acumuladas”.
OCU recomienda que, junto al fraccionamiento del pago de las facturas acumuladas, se solicite por los usuarios afectados la
indemnización que les corresponde de 30,05 euros por cada reclamación no atendida en cinco días hábiles por incumplimientos reiterados y sucesivos en la calidad del servicio, y recuerda que, aquellos usuarios acogidos al
pago por domiciliación bancaria no podrán adeudárseles en cuenta cantidad alguna
hasta transcurridos 7 días naturales de la emisión de la factura.
En cualquier caso, los usuarios
"pueden y deben" solicitar un
desglose pormenorizado de la deuda acumulada, para asegurarse de que "
no incluyen consumos con más de un año de antigüedad", recuerda la organización.