La Delegación Territorial de la Consejería de Cultura en Sevilla ha contratado a la empresa especializada Metis Conservación y Restauración, para acometer trabajos de consolidación en los revestimientos del 'stibadium' del sector de la Cañada Honda del conjunto arqueológico de Itálica, enclavado en Santiponce y que guarda las ruinas de la antigua ciudad romana cuna del emperador Trajano y patria de la familia de Adriano, un recinto que aspira a la declaración de Patrimonio Mundial.
Estas nuevas tareas de consolidación han sido contratadas por un valor que roza los 5.000 euros y se suman al encargo realizado a mediados de 2021, por 6.897 euros, para acometer actuaciones urgentes en este elemento arquitectónico del conjunto arqueológico de Itálica, ante los "alarmantes daños" detectados en tal estructura tras las inclemencias meteorológicas que marcaron el comienzo de dicho año 2021, principalmente heladas y fuertes precipitaciones.
En concreto, los vestigios del 'stibadium' de Itálica se encuadran en los restos de una antigua 'domus' del sector del conjunto arqueológico bautizado como de Cañada Honda, ubicado a su vez en la zona alta del yacimiento y abierto al público en noviembre de 2018 para ampliar el circuito visitable.
Se trata de un lecho semicircular de ladrillo y mortero destinado a la celebración de banquetes, en el cual los comensales se reclinaban instalados radialmente en orden jerárquico, que constituye un elemento "de gran rareza y singularidad", como figura expresamente en la memoria técnica de aquella contratación de 2021, recogida por Europa Press.
Es más, de toda la antigua Hispania romana sólo se conservarían dos 'stibadium' y este de Itálica sería el que presenta mejor estado de ellos.
LAS INCLEMENCIAS METEOROLÓGICAS
La memoria técnica de dicha contratación de 2021, en cualquier caso, reflejaba que "tras las recientes inclemencias meteorológicas acaecidas a principios de 2021, heladas y lluvias torrenciales", habían sido "detectados alarmantes daños" en este enclave de gran valor patrimonial.
"Las filtraciones de agua, la humedad, la colonización biológica y las drásticas fluctuaciones de temperatura han conllevado la disgregación y desprendimiento de fragmentos de mortero y ladrillos originales, existiendo zonas de gran debilidad estructural debido a los continuos procesos erosivos a los que se encuentra expuesta la estructura", resumían los autores de la memoria técnica de este expediente.
En ese sentido, el contrato promovido entonces por la Consejería de Cultura estaba destinado a una "intervención de emergencia consistente en la consolidación puntual" de la superficie del 'stibadium' de Itálica, "a base de reposiciones puntuales que contribuyan a recobrar en lo posible la estabilidad de las masas de mortero, que impidan también el resurgir de la vegetación descontrolada y que, por ende, mejoren el entendimiento de su volumetría".
DE CARA A UNA RESTAURACIÓN "DEFINITIVA"
A la entidad adjudicataria, Gares Restauraciones, le fue además encomendado acometer "una evaluación en mayor profundidad del estado general de la estructura para determinar la actuación de conservación de carácter definitivo que requieran las patologías detectadas".
Es decir que había de formular "una propuesta de actuación valorada para la restauración definitiva" de esta singular estructura de Itálica, un recinto arqueológico que aspira a la declaración de Patrimonio Mundial como gran ciudad ceremonial durante la etapa del emperador Adriano, que como mínimo contó con raíces familiares en dicha población.