. En su discurso, ha anunciado una
. Inversión que dependerá, y no es menor la dependencia, de que el
(328 millones de euros) para políticas que fomenten y contribuyan a fijar población al territorio.
Villalobos ha reclamado que las
administraciones nacional y regional aporten la misma cantidad para que así se destine a los pueblos sevillanos en torno a
300 millones para combatir la despoblación, sobre todo en los
50 municipios sevillanos que pierden habitantes desde 2008 y de los cuales
17 lo hacen a un ritmo de en torno a un 5%."Como el órdago es tan mayúsculo, toca que todos nos retratemos ante la despoblación", ha reforzado en sus palabras.
El otro gran reto que se ha planteado el presidente de la Diputación es la
digitalizacion, donde su intención es prestar una trato "personalizado" a los
pueblos de menos de 5.000 habitantes, implantar cien por cien el
expediente electrónico y alfabetizar a la sociedad más descolgada de estas herramientas, los mayores. "Si a finales de los setenta era primordial contar con agua y luz en todos los pueblos, la transformación digital es hoy ese agua y esa luz que necesita toda localidad para no terminar siendo un pueblo vacío", ha manifestado ante el Pleno que acaba de tomar posesión de su acta como diputado provincial.
La lucha contra la
despoblación y la
digitalizacion serán los
dos ejes sobre los que pivotará la acción de gobierno de Villalobos en este mandato. Lo hará a través de
dos oficinas específicas y todo ello bajo un lema "
Objetivo, provincia viva". "Ésta será la aspiración y la hoja de ruta que inspire la acción diaria de las oficinas", ha subrayado el flamante releegido Fernando Rodríguez Villalobos.
Por último, ha ofrecido a los
empresarios un
foro bimensual en un "espacio de negocio en un enclave privilegiado de la ciudad" para
atraer inversiones a la provincia con las que seguir generando empleo.
Un acto sin sorpresas
Fernando Rodríguez Villalobos se ha sometido a la votación como presidente de la Diputación sin sobresaltos, como era de esperar. Los
18 diputados socialistas frente a los
13 de la oposición (cinco del PP, cinco de Adelante, dos de Ciudadanos y uno de Vox), que han votado en blanco, han sido los encargados de aupar a Rodríguez Villalobos a un nuevo mandato, en el que los prolegómenos no han estado exentos de tuburlencias que se saldaron con un acuerdo entre Ferraz y San Vicente, sedes del PSOE nacional y andaluz, para mantener las presidencias de las diputaciones de la comunidad sin cambios.
No ha habido sobresaltos tampoco en las fórmulas elegidas por los diputados provinciales para tomar posesión de su acta. La bancada socialista ha optado por prometer, frente a PP, Cs y Vox que se han decantado por el juramento. Los de Adelante han prometido pero "por imperativo legal".
En el turno de intervenciones de los portavoces de los grupos políticos, ha sido el de
Vox,
Rafael García Ortiz, hermano de la procuradora sevillana asesinada por ETA, Ascensión García Ortiz (esposa del concejal popular Alberto Jiménez Becerril), el primero en tomar la palabra para insistir en que su fuerza política en la Diputación será una garantía de "lealtad" al Rey, a la Constitución y a las leyes.
María Almansa, de
Cs, ha adelantado a Vilallobos que su formación "no va decaer en el empeño" de conseguir "la limitación de mandatos" en la Diputación también. "Tenemos la esperanza", ha sentenciado. Por
Adelante,
María Izquierdo ha reclamado que el PSOE no caiga en la tentación de aprobar políticas en solitario. "Le pedimos que escuche, señor Villalobos", ha manifestado. Por parte del
PP,
Luis Paniagua, el nuevo portavoz, ha pedido al presidente de la Diputación "lealtad institucional" con el "Gobierno del cambio" de la Junta de Andalucía, con el que, "por primera vez en la historia", no comparte color político. "Gobernar es pactar", ha apostillado antes de que la portavoz del
PSOE,
Trinidad Argota, haya ofrecido "trabajo, esfuerzo y dedicación" del Gobierno provincial para lograr la "cohesión social, económica y territorial".