Probablemente la plaza que en Torremolinos más sorprende al visitante es la de la Unión Europea. Se ha convertido en todo un emblema del municipio. Sus bancos de mampostería revestida de diminutos azulejos de color celeste, que aprovechan graciosamente la redondez exterior de las jardineras arbóreas, ostentan, reproducidos en cerámica, los escudos de las naciones que componen la Unión Europea. Al fondo, en la confluencia de las calles Marqués de Salamanca y Conde de Mieres, llama la atención la bella rotonda de veintidós metros de diámetro sobre la que se elevan majestuosamente los mástiles en los que ondean las banderas de los países de la Unión. Pero lo más cautivador de la Plaza es el monumento conocido como 'El Rapto de Europa' y que se representa con un gran toro blanco que lleva en sus lomos a una simbólica mujer llamada Europa, que sostiene en alto, en su mano derecha, un aro con doce estrellas.
Son centenares, si no miles, las fotografías del emblemático monumento del 'Rapto de Europa'" que a diario se llevan en sus cámaras los visitantes. Para ellos es gran motivo de orgullo fotografiarse con el insólito monumento detrás, cual si fuera la más valiosa escultura de un museo al aire libre. Al volver a sus respectivos lugares de residencia, seguramente mostrarán con orgullo las fotos a sus familiares, amigos y compañeros de trabajo y les dirán más o menos esto: "¡Mira, mira qué cosas tan lindas y originales hay en Torremolinos, además de sol y playas!". Y seguro que los animarán a que conozcan Torremolinos en las próximas vacaciones.
De paso nuestros amables visitantes habrán fotografiado también, a gran tamaño, la placa que, al pie del monumento, explica en español y en inglés la curiosa leyenda del rapto de Europa. El mitológico relato concreta que Zeus, señor de los dioses y padre de los humanos, observó un día en las playas de Sidón a una muchacha llamada Europa, hija de Agenor, rey de Tiro, y de Telefasa. Zeus se enamoró de Europa y, temiendo su rechazo, se transformó en majestuoso toro blanco y se acercó pacíficamente a la muchacha que, fascinada, lo acarició y se encaramó a sus lomos. El animal aprovechó el momento y partió raudo con la joven sobre sus espaldas, adentrándose con ella en el mar y nadando velozmente hasta alcanzar la isla de Creta. Aquí Zeus, junto a una fuente cercana al lugar de Gortina, reveló su identidad a la doncella y la sedujo. Consumado el rapto, el toro blanco fue convertido en la constelación 'Taurus' del Zodiaco y Europa recibió honores divinos al morir, dando nombre al continente europeo.
Resulta oportuna y reveladora la presencia en nuestro municipio de este singular monumento del 'Rapto de Europa'. En cierto modo, tanto la escultura del toro blanco como la de la mujer que sobre él va sentada son toda una alegoría de Torremolinos. Esta mujer de nombre Europa y que en la versión monumental que nos ocupa eleva al cielo, al sol, un aro o corona de doce estrellas, bien puede representar a Torremolinos, que es el compendio de la Europa turística. Torremolinos ostenta con propiedad una gran corona de estrellas que son todas las naciones, europeas o mundiales, representadas en las gentes que vienen a disfrutar del sol torremolinense. En este sentido, puede afirmarse que Torremolinos eleva hasta el sol su aro o corona de estrellas.
Por otro lado, el toro -y particularmente el toro blanco-, también puede considerarse como una representación atípica de Torremolinos. Curiosamente el nombre de nuestro municipio empieza con 'Tor', como en el vocablo común "toro". Y con las letras de "Torremolinos" puede componerse con toda naturalidad la palabra "toro", como también puede formarse la palabra "sol" al mismo tiempo y aún nos quedaría por establecer con los caracteres sobrantes el imperativo "miren", que es toda una invitación. Pero el toro es símbolo de poder y el poder de Torremolinos está en su turismo. La palabra "turismo" también comienza con la letra 'T', al igual que "Toro" y "Torremolinos". Y Torremolinos es el primer municipio turístico de España: realmente el "toro blanco" del país y el "toro blanco" de Europa, la Europa que cabalga a lomos del albo toro de Torremolinos, el sol de oro del turismo. Indiscutiblemente, los lomos de Torremolinos son el más sólido y soleado soporte del turismo europeo. Y, por ende, del turismo mundial.
Y esta imagen de la Europa que monta el toro de Torremolinos y que diestramente apunta con su aro de estrellas al sol, al tiempo que el toro mira a occidente y parece dirigirse a él (tal como en la leyenda se dirigió desde las costas orientales de Fenicia hasta las occidentales de Creta), bien pudiera apuntar al turismo de América Latina, evidenciado en Torremolinos a través de la organización de la Feria de Turismo EUROCOTAL (cuyas letras también esconden el sustantivo "toro"), de la que es Presidente de Honor el Príncipe de Asturias, Don Felipe de Borbón.