La Guardia Civil ha detenido en Sedaví (Valencia) a un hombre de 61 años por presuntamente agredir a su hija, de 18 años, y amenazar con dos cuchillos de grandes dimensiones a los agentes que se presentaron en su domicilio para arrestarle, a quienes, además, les roció con un gas lacrimógeno ante de tratar de lanzarse por el balcón para quitarse la vida.
Los hechos se iniciaron a raíz de que la joven se presentara en el acuartelamiento de la Guardia Civil para denunciar las agresiones que presuntamente había sufrido por parte de su padre. Ante el estado de "nerviosismo" de la joven, los agentes la derivaron al centro de salud de la vecina localidad de Alfafar, aunque finalmente fue atendida en un hospital para una "mejor valoración" de sus lesiones, según ha informado el instituto armado en un comunicado.
Minutos después del testimonio de la joven, los agentes se presentaron en el domicilio para entrevistarse con el padre y proceder a su detención. Sin embargo, el hombre, que se negó a salir de la vivienda, se encontraba "fuera de sí" y comenzó a amenazar a los agentes con dos cuchillos de grandes dimensiones.
Después de tratar de mediar con él durante más de 45 minutos, los agentes decidieron pedir refuerzos. En ese momento, el hombre amenazó con quitarse la vida y también con la de las personas que accediesen al domicilio. De hecho, llegó incluso a rociar a los agentes con gas CS --un gas sofocante con una base de cloro que es de venta y tenencia prohibida para particulares-- a través de la cerradura de la puerta.
Ante estos hechos y tras escuchar "ruidos" en el interior del piso, los agentes decidieron acceder por la fuerza para evitar que el hombre se precipitase por el balcón. La puerta se encontraba apuntalada por muebles y diversos enseres y, cuando los agentes lograron acceder al interior de la vivienda, el hombre los recibió un spray de gas CS y les propinó puñetazos antes de tratar de arrojarse por el balcón.
En ese momento, los agentes se abalanzaron sobre el hombre para tratar de impedirlo y evitar así el intento de suicidio, momento en que se rompió la barandilla del balcón. Tras un fuerte forcejeo, durante el que el hombre trató incluso de arrastrar a uno de los agentes al vacío, consiguieron reducirlo. Todos los agentes han tenido que ser atendidos por el SAMU por inhalación de gas, golpes y escoriaciones.
Al detenido, un hombre de 61 años y de nacionalidad española, se le imputan los delitos de desobediencia, resistencia, atentado a agente de la autoridad y violencia doméstica.
Por su parte, la hija, una vez atendida en el hospital, ha formalizado la denuncia contra su padre por malos tratos en el ámbito doméstico, tanto físicos como psicológicos.
En la actuación han intervenido agentes de la compañía de Paiporta y patrullas de la Policía Local de la localidad para regular el tráfico en la zona. Las diligencias han sido entregadas en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº3 de Catarroja (Valencia).