Un prófugo de la justicia de Rumanía por liderar una red de tráfico de anabolizantes, que se había eliminado el 70 por ciento de los tatuajes del cuerpo y se había alterado las huellas dactilares, ha sido detenido en una mansión de Pedreguer (Alicante).
Según la Policía Nacional, este individuo, que ha sido capturado junto a otro miembro de su red, usaba múltiples identidades y tiene pendiente una pena de prisión impuesta por los delitos de tráfico de drogas y organización criminal entre 2013 y 2014. El hombre se inyectaba bótox y había eludido a las autoridades policiales manteniendo el anonimato.
En la mansión de Pedreguer, al norte de la provincia alicantina, también se arrestó a un miembro de la organización sobre el que también pesaba una orden europea de detención y entrega por parte de Rumanía.
Aunque ambos tomaban diferentes medidas de seguridad y autoprotección, los investigadores lograron detener al cabecilla en las inmediaciones de su vivienda cuando realizaba unas gestiones en un establecimiento comercial cercano, y a su segundo cuando se disponía a abandonar el domicilio.