El extremo dejó claro ayer a la conclusión del entrenamiento que llevó a cabo el equipo en El Rosal, que espera conseguir la victoria ante el Real Unión y quitarse de ese modo el mal sabor de boca que les dejó el empate ante el equipo madrileño: “Tras empatar en Vallecas, que es un campo complicado, veremos si ante el Irún, un rival que en teoría está hecho para pelear por no descender, logremos los tres puntos y hagamos bueno el empate sumado en Vallecas”.
Pero López Silva avisa de que no será nada fácil: “Es un equipo agresivo, fuerte, de nuestra Liga y será complicado” y admitió que había algo de intranquilidad en el seno del equipo porque “el juego era bueno, pero no llegaban los resultados. Quizás había un poco de ansiedad por no conseguir victorias”, afirmó.
El onubense, desde que viste la camiseta amarilla, casi siempre actuó en la banda izquierda, a pesar de ser diestro. Ante el debate abierto sobre el escaso rendimiento de Enrique en ese puesto y la llegada de Nano, se le preguntó por la posibilidad de regresar a su banda natural: “Me siento bien por las dos bandas, la decisión la tiene el míster y hay que acatarla”, concluyendo que al final “uno lo que quiere es jugar, sin importar la posición”.
Ogbeche entre algodones
El delantero Ogbeche se ejercitó ayer en solitario en las instalaciones de El Rosal. El nigeriano sufre una sobrecarga y es duda para el domingo. El que seguro no podrá estar, aunque aún no ha entrado en los planes del navarro en lo que ha transcurrido de temporada, será Roberto Mansilla, ya que el central estará de baja alrededor de tres semanas por una tendinitis en su rodilla derecha. Luego hay otros jugadores con pequeños problemas físicos, casos de Tristán, Casilla, Álvaro Silva y Víctor Ormazábal.