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Jerez

Rocío 'La Jerezana', artista y todo corazón

Canta, baila y vive por el flamenco. Acaba de presentar el single ‘Sueño Cumplido’ en el que recopila bulerías en recuerdo a sus padres

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“Algo tiene que tener, esta tierra de Jerez…” ¿Qué tendrá esta ciudad para que dé tantos y tan buenos artistas? María de la Colina ya lo cantó en sus sevillanas y todavía parece no haber encontrado una respuesta sólida. Lo que sí está claro es que no se quiso perder la presentación del single ‘Sueño Cumplido’, de Rocío Montes de Oca, conocida por todos como ‘La Jerezana’.

No faltó la reina de las sevillanas flamencas, que vino para arropar a este ser de luz y con un corazón lleno de bondad que solo encuentra felicidad en el arte, motor de sus días y bastión de superación. Tampoco quiso ausentarse Paco Cepero, vecino del barrio de San Miguel y maestro de la guitarra que, todo hay que decirlo, siempre está cuando se le llama. La ilustre cantaora sanluqueña María Vargas estuvo con toda generosidad para que Rocío siguiese sonriendo, así como su equipo de trabajo liderado por José Quevedo ‘Bolita’, José Gallardo y su familia.

En ‘Sueño Cumplido’, Rocío recoge sus habituales bulerías en un estudio de grabación para el disfrute de todos los que respiran sensibilidad. Ella, que es aficionada desde pequeña gracias a la crianza en una casa en la que las tradiciones andaluzas, el flamenco y la copla estaban instaladas, sigue latiendo a compás de nudillos en la mesa. Es socia de la Peña La Bulería, la de su barrio, en la que tan buenosratos pasa junto a los suyos. Es rociera como la que más, le gusta una copita de vino y un brindis los fines de semana, pasea por el centro recibiendo abrazos, es natural y muy artista, no le faltan sus labios bien pintados y su pelo recogido. ¡Y esos corales!

Esta es Rocío, que se ha autofinanciado esta publicación con el propósito, además, de colaborar con lo recaudado con el programa educativo de Cedown Jerez. Un proyecto fascinante con el que se volcó Bolita, “amigo de la familia y al que nunca podremos agradecer tanto cariño y dedicación”, señala Paqui, hermana de la protagonista. Y es que Rocío, a punto de cumplir los 50 años, sabe bien qué es el cante de raíz porque se crio por el Cerro Fuerte, en una época marcada por la espontaneidad de la fiesta, la celebración de las zambombas y la proliferación de las peñas flamencas.

Es una gran aficionada a la saeta, pues en esa zona del barrio de San Miguel, cada Viernes Santo, llovían rezos cantados tanto de los balcones como de cualquier acera: los Méndez, familia Salmonete, Diego Rubichi, El Garbanzo, los Moneo… aquella Peña Colchonera de tanto sabor a barrio. Por eso ella luce su mantilla cada Semana Santa, y le canta a sus devociones. Así vive esta jerezana, pensando en la siguiente vez en la que disfrutar de la realidad que nunca se lo puso fácil pero  a la que siempre hizo frente. “Todos estos proyectos, sus actuaciones, apariciones en televisión o encuentros con artistas nacen de las ganas por hacer de cada día más especial que el anterior”, comenta Paqui, que se desvive por su hermana. No hay que pasar por alto que Rocío ha compartido escenarios con María José Santiago, El Nano de Jerez o Miguel Poveda, a quien le une gran amistad. Autodidacta, no se queda solo en las bulerías, sino que va avanzando en alegrías, tangos y lo que “le salga del corazón”.

Uno de sus sueños por cumplir es conocer a José Soto Soto, como llama a José Mercé,  y grabar un pasodoble que ha escrito para ella José Gallardo y que “ya lo está ensayando”. Paqui no quiere desaprovechar la oportunidad para agradecer a todos los que quieren a Rocío, “porque a ella le da vida que los artistas la piropeen, que la propia Alcaldesa de Jerez esté atenta a sus cosas, como Paco Camas, que lo conocemos de toda la vida del barrio, así como Isamay que nos ha facilitado todo para la presentación”.

Lo único que falta es que la maldita pandemia termine por marcharse para que el ritmo vuelva a ser el de antes, ya que “con el virus hemos tenido a Rocío mucho tiempo en casa para evitar contagios y eso afecta a su ánimo”, y para que se den esos ratos imborrables como los que recuerda “junto a El Bo, Fernando de la Morena, El Capullo o Vicente Soto, que cuando hemos estado juntos Rocío ha sido la más feliz del mundo”.

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