Hay historias de mascotas que sorprenden por la fidelidad y lealtad que muestran hacia sus propietarios, en ocasiones, en situaciones verdaderamente particulares. Una de ellas se producía el pasado martes, cuando una ambulancia llevó a una vecina de Faraján al Hospital Comarcal para que recibiera su tratamiento habitual.
Fue entonces cuando su perro Travis, de unos 13 años y cruce de razas, decidió ir en busca de su dueña siguiendo el rastro de la ambulancia con su olfato desde Faraján hasta la puerta de Urgencias del centro hospitalario de referencia.
Así lo relata el agente de Policía Local Rafael Conde, amante de los animales que siempre está dispuesto a colaborar en la localización de mascotas abandonadas, y que recibió una llamada en la que le comunicaron que había un perro en la puerta de Urgencias, y que los sanitarios habían tenido que sacarlo de una sala de curas.
“Cuando llegué comprobé que era un perro con dueño, ya que tenía un costoso collar antiparasitario. Fui a por el lector de chips que tenía en el coche y me salió que el propietario vivía en Faraján. Preguntando por allí, una conductora de ambulancia me dijo que poco antes habían traído a una mujer que era de allí para unas curas”, narra Conde.
El agente cree que Travis pudo haber recorrido alrededor de 20 kilómetros en busca de su dueña, aunque, cuando llegó, la mujer ya se había marchado. Finalmente, contactó con su dueña y un vecino del pueblo que estaba por Ronda lo recogió y se lo llevó de regreso. Sin duda, una anécdota que refleja la entrega incondicional que muchas mascotas sienten hacia sus dueños
