El Ibex 35 ha iniciado la sesión de este viernes con una bajada del 2,4%, arrastrado por los bancos y el cierre en negativo de Wall Street, con caídas superiores al 1,6%, con lo que el selectivo madrileño roza la cota de los 9.200 puntos después de cerrar este jueves en los 9.423,2 enteros.
En concreto, el selectivo madrileño inició la sesión en los 9.232,29 puntos, con una caída superior al 2% después del cierre en negativo de este jueves de Wall Street y de las principales bolsas asiáticas. La causa, las dificultades financieras de Silicon Valley Bank, un banco norteamericano que se desplomó este jueves un 60% tras anunciar una ampliación de capital de 2.250 millones de dólares, lo que afectó a todo el sector bancario estadounidense.
La combinación del posible impacto económico de unos tipos de interés mucho más elevados de lo esperado y la oleada bajista desatada en los bancos estadounidenses ha arrastrado al sector bancario en el Ibex 35. En los primeros compases de la sesión de este viernes las mayores caídas eran para Santander (-6,02%), Sabadell (-5,83%), Unicaja (-4,89%), BBVA (-4,23%) y Bankinter (-4,21%).
En el lado de las subidas se situaban Red Eléctrica (+0,67%), Naturgy (+0,33%) e Iberdrola (+0,17%),
El resto de Bolsas europeas también abrieron con caídas: Londres y Francfort cedían un 1,5%, mientras que París y Milán se dejaban un 1,75% y un 2,1%, respectivamente.
Este viernes además los mercados permanecen a la espera de conocer este viernes el informe de empleo oficial en Estados Unidos, después de que el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, trasladase ante el Congreso del país norteamericano que la cuantía de la próxima subida de tipos --prevista para el 22 de marzo-- todavía no está decidida.
Asimismo, el precio del barril de petróleo de calidad Brent, referencia para el Viejo Continente, se situaba en 81,09 dólares, con un descenso del 0,61%, mientras que el Texas cotizaba en los 75,08 dólares, un 0,85% menos.
En el mercado de divisas, la cotización del euro frente al dólar se colocaba en 1,0598 'billetes verdes', mientras que la prima de riesgo española se situaba en 101 puntos básicos, con el interés exigido al bono a diez años en 3,518%.
