Fuentes jurídicas han informado de que el acusado, que se había fugado de Rusia y se refugió en Barcelona para intentar eludir una posible condena de diez años de cárcel por homicidio imprudente, se ha negado ante el magistrado a ser extraditado a su país.
No obstante, una vez que Rusia formalice su petición para que le sea entregado el empresario, en el plazo de cuarenta días se celebrará una vista de extradición.