El Dreamland Gran Canaria y el Valencia Basket cerrarán este jueves la primera jornada de los cuartos de final de la Copa del Rey de Málaga con el duelo teóricamente más igualado y que ambos afrontan también con dudas previas.
Ambos equipos están separados en la ACB por una sola victoria, dado que el Gran Canaria suma catorce y el Valencia trece, una estrecha distancia que no se da en los otros duelos, en los que la diferencia entre las posiciones de unos y otros es mayor.
El equipo de Jaka Lakovic, que ejerce de cabeza de serie, llega tras haber caído en la cancha del Zunder Palencia, colista de la Liga Endesa. El de Álex Mumbrú lo hace tras haberlo hecho en la del Bilbao Basket.
El equipo insular afronta esta cita desde la cuarta plaza de la liga y después de haberse clasificado con solvencia para los octavos de final de la Eurocopa.
Además, hace apenas un mes se impuso por 79-86 en la Fonteta en un choque que le permitió ser cabeza de serie y en el que AJ Slaughter por fuera y Ethan Happ por dentro fueron una pesadilla para la defensa local, que tampoco contaba con la aparición del francés Pierre Pelos. La mejor puntería canaria desde la línea de 6’75 fue más importante para el desarrollo del choque que el dominio valenciano del rebote.
Para el Gran Canaria, que en principio llega sin bajas a al cita, será su décimo sexta participación en un torneo en el que en 2016 llegó a disputar la final pero cayó ante el Real Madrid.
El Valencia, que disputará su vigésimo quinta Copa y conquistó el título en su debut de 1998, llega a esta edición tras un arranque de temporada muy exigente en el que ha logrado mantener sus opciones de superar la fase regular de la Euroliga y de estar en la lucha por el título de la ACB.
La fórmula que más éxito le ha dado de momento al conjunto de Mumbrú es dejar a sus rivales en 80 o menos puntos, un guion en el que se multiplican sus opciones de ganar, pero aunque durante etapas de la campaña ha sido capaz de darle continuidad a ese buen trabajo atrás también ha tenido otras en las que no.
Además en ataque, cuando la defensa no le ha permitido correr, la llegada de Kevin Pangos no se ha traducido aún de manera continua en una mejora ni del ‘dos contra dos’ ni del ‘cinco contra cinco’ y el equipo sigue dependiendo en exceso del ‘uno contra uno’.
Para la Copa es baja segura el interior Boubacar Toure por una lesión en la espalda y es duda el también pívot Brandon Davies, que sufrió un esguince de rodilla hace un par de semanas y que apura sus opciones para estar disponible. En principio sí lo estará Xabi López-Arostegui, que se perdió el duelo de Bilbao por un esguince de tobillo pero, por si acaso, estará en la convocatoria el joven Sergio De Larrea.
Más allá del canterano, si está Davies, Mumbrú deberá hacer un descarte, que será uno de sus tres extracomunitarios (Jared Harper, Justin Anderson y Nate Reuvers) y si no está deberá hacer dos y uno de ellos deberá ser igualmente uno de esos tres estadounidenses.
El encuentro será el quinto enfrentamiento entre ambos equipos en la Copa con un balance hasta ahora de tres victorias del Valencia, que firmó su última victoria en 2017 también en cuartos, y una del Gran Canaria, que se llevó ese mismo duelo en 2016 en A Coruña.
