José Navarro ya no es concejal de Seguridad, Recursos Humanos y Deportes de Elche (Alicante) tras presentar su renuncia. Navarro, que había sido acusado de tener sexo bajo un trono dentro de una iglesia a la accedió borracho, ha tenido que abandonar.
A pesar de que el Partido Popular de Elche había mostrado su apoyo, la presión sobre su figura le ha obligado a abandonar. De hecho, la cofradía a la que pertenecía lo expulsó nada más conocerse la historia.
Navarro se defendió y desmintió los hechos afirmando que era víctima de un “rumor malintencionado” y que no había “cometido ningún acto de ninguna índole sexual en el interior de la iglesia”. Sí reconoció acceder a la iglesia bajo los efectos del alcohol.
Pese a todo, solo dos días después, ha tenido que renunciar. Hoy, el alcalde Pablo Ruz, visiblemente emocionado, ha explicado la situación: “No entro a valorar rumores, no soy un fariseo. Certifico su trabajo como sobresaliente como concejal, como trabajador y como responsable de Recursos Humanos y Deportes”.
Su socia de Gobierno, Aurora Rodil (Vox), se ha encomendado a la divinidad: “Le pedimos a la madre del cielo y a Jesús en su inmensa misericordia, que lo proteja a él, a su familia, a sus padres y también a nuestro gobierno”.