La exmujer del testaferro confeso del expresident de la Generalitat Valenciana y exministro Eduardo Zaplana, Fernando Belhot, ha asegurado este viernes en su declaración como testigo en el juicio del caso Erial que desconocía que su exmarido manejaba fondos en el extranjero a nombre de Zaplana en cuentas en las que ella figuraba también como titular.
Esta mujer (natural de Uruguay, como Belhot) ha asegurado no tener conocimiento ninguno sobre las cuentas tituladas por su exmarido en Suiza, Austria o España, si bien ha admitido que solía firmar documentación "con total confianza pero no sabía para qué".
"Lo único que sé es que mi exposo un día me vino a pedir una firma para cancelar una cuenta que teníamos en el exterior. Le dije que no sabía nada. Esto pasó estando ya divorciada (después de 2018). No me dio más explicaciones", ha asegurado.
A preguntas del letrado de Zaplana, Daniel Campos, esta mujer ha explicado que su exmarido nunca le habló de Zaplana.
En el transcurso de esta declaración se ha producido una anécdota cuando el abogado Campos le ha preguntado si conocía la "relación" de su exmarido con otra testigo uruguaya, a lo que la exmujer de Belhot ha respondido: "Quiero pensar que no tenía ninguna relación, porque relaciones le sobraron. Es recontrapariente mía, hija de una prima segunda de mi madre muy lejana, alguna vez la vi en España".
El letrado se ha disculpado y ha explicado que se refería a "relación financiera", y la testigo ha respondido: "Ni la más mínima idea".
El presidente del tribunal, Pedro Castellano, ha reiterado las disculpas por el malentendido y ha insistido en que no hay ningún dato en el sumario sobre posibles relaciones amorosas de Belhot, a lo que la testigo ha respondido que agradecía mucho la aclaración, porque ha sufrido "muchas infidelidades".
Este viernes se ha escuchado también el testimonio del anterior propietario del piso supuestamente adquirido por Zaplana en la calle Núñez de Balboa de Madrid, que ha admitido que recibió 100.000 euros en efectivo en esta operación, aunque ha señalado que nunca conoció a Zaplana.
También ha comparecido el director del puerto de Altea, quien ha reconocido como propios unos documentos incautados y que constan en el sumario en los que aparece la anotación "ático Zaplana" relacionada con una operación inmobiliaria en este municipio alicantino.
A preguntas del fiscal, este testigo ha asegurado que quien realmente se había interesado por esa compra era Joaquín Barceló, amigo del exministro, pero que puso el nombre de Zaplana porque "siempre iban juntos y era la persona más relevante".