La Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a la joven acusada de degollar a su madre en una vivienda de l'Alcudia de Crespins y de apoderarse de sus fondos para saldar deudas de drogas a veintitrés años y medio de cárcel, en una sentencia de conformidad entre todas las partes.
El magistrado presidente del tribunal popular del juicio que se celebró a principios de este mes de junio condena a la joven a una pena de veinte años de prisión por el asesinato de su madre, con el agravante de parentesco, y a tres años y medio por robo con violencia.
Asimismo, la acusada deberá indemnizar a su hermano mayor con 84.978,67 euros, según han informado a EFE fuentes de la acusación particular.
La joven, que tenía 18 años el 1 de abril de 2020 cuando cometió el crimen, admitió ante Tribunal del Jurado que propinó un corte en el cuello a su madre después de que su novio, menor de edad, planificase y ejecutase una agresión a golpes.
Relató asimismo durante el juicio que ella y su novio, de 17 años, eran consumidores habituales de cocaína, speed y marihuana y que estaban endeudados.
Tras el asesinato, la encausada se apoderó de dos tarjetas bancarias de la víctima con las que sacó más de 6.200 euros, desde el día de los hechos hasta el 4 de junio, según argumentó el fiscal durante la vista.
La joven se mostró arrepentida ante el tribunal y pidió perdón por sus actos.
Su compañero sentimental ya fue juzgado y condenado por estos mismos hechos -a una pena de internamiento- por un juzgado de menores.
Tanto la Fiscalía como la acusación particular, que ejercía el hermano de la acusada, pedían una condena inicial de 30 años de prisión por asesinato y robo con violencia, con la agravante de parentesco, y una indemnización de más de 80.000 euros.
Finalmente la defensa, Fiscalía y la acusación particular llegaron a un acuerdo de conformidad, que reducía la pena de cárcel a 23 años y medio.