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Un español juega por primera vez la serie final de la NBA

Una final de la NBA entre Los Angeles Lakers y los Boston Celtics, la más clásica de las clásicas, así como el retorno de los Estados Unidos a la cúspide del baloncesto olímpico en Pekín...

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  • El fichaje de Pau Gasol por los Lakers que lidera Kobe Bryant ha sido una de las grandes atracciones de la temporada pasada en la NBA. -
Una final de la NBA entre Los Angeles Lakers y los Boston Celtics, la más clásica de las clásicas, así como el retorno de los Estados Unidos a la cúspide del baloncesto olímpico en Pekín, han llevado al baloncesto por el túnel del tiempo en el año mágico del deporte español que, por supuesto, ha tenido presencia en esos dos grandes hitos de la canasta.

Hacía más de veinte años, exactamente veinticinco, que los dos conjuntos con mayor glamour y mística de la Liga de todas las Ligas, no se habían visto las caras sobre el parqué para disputarse el anillo de campeón. El baloncesto ha avanzado hacia el pasado a lo largo de 2008. Ha saltado un cuarto de siglo en el tiempo para volver a disfrutar de una final dorada y verde.

Treinta anillos entre dos conjuntos protagonistas de algunos de los enfrentamientos más épicos de todos los tiempos, un puñado de excelentes jugadores sobre la pista y toda la emoción de los años ochenta. La siluetas de Magic Johnson y de Larry Bird, los dos adalides de la maravillosa década de los ochenta, y un español en el fragor de la batalla: Pau Gasol.

La reedición de la final por excelencia ha sido posible gracias a la mejoría experimentada por el equipo del trébol. La participación de Gasol, fruto de la dimensión alcanzada por el internacional español. Pau es uno de los grandes entre los grandes, bandera del equipo nacional español y complemento de Kobe Bryant gracias al traspaso que los Lakers acordaron con su anterior equipo, los Grizzlies de Memphis.

La llegada de pau a los lakers

La llegada de Gasol al Staples Center, a Hollywood, traspasado en una operación que muchos analistas han considerado el mayor chollo de la historia de la NBA para el cuadro angelino.

“Ha sido muy importante. ¿Recuerdan cuando los americanos le robamos todo a los indios? Pues es justo lo que ha sucedido cuando los Lakers obtuvieron a Gasol a cambio de nada”, comentó el histórico Charles Barkley cuando el ala-pívot llegó a Hollywood.

Después de todo, el cambio de aires de Gasol tampoco ha sido tan traumático como en principio se apuntaba para Memphis porque se marchó uno, Pau, y aterrizó otro, Marc, al que también aguarda un porvenir esplendoroso.

Pau Gasol, que desde su llegada a la NBA ha roto moldes sin prisa, pero sin pausa, se ha convertido en el primer español que viste la camiseta de los Lakers y, desde luego, el primero en disputar una final de la liga estadounidense. Ahora ha seguido sus pasos Marc, el mediano de la saga.

Y con éxito. Los Memphis han soltado a un excelente jugador de baloncesto y han reclutado a otro y, además, todo en familia. Marc ha empezado con muy buen pie, pero las finales aún le quedan lejos. Los Celtics, el equipo más laureado de la NBA (dieciséis anillos), han regresado a la cima de la liga gracias a los fichajes de Kevin Garnett y de Paul Pierce. Ambos han sido clave. Marc también es clave para Memphis, y eso que es la temporada del debut.

Otro debutante de lujo en la NBA es Rudy Fernández, cuya irrupción en la Liga con la camiseta de los Trail Blazers de Portland ha sido meteórica. En las listas de todos los equipos del campeonato estadounidense figura también en letras rojas el nombre de otro integrante de la selección que ganó la plata en Pekín: Ricky Rubio.

Final olímpica

El segundo túnel del tiempo del baloncesto ha pasado por Pekín. Los estadounidenses recuperaron el oro que no ganaban desde Sydney 2000.

Para reconquistarlo han tenido que tirar de los mejores jugadores de los que disponen y resistir hasta el último segundo de la final para apartar a España del primer escalón del podio.

El cetro olímpico regresa, pues, a manos de los estadounidenses, los Lakers y los Celtics disputan otra vez la final y el CSKA Moscú, mito entre los mitos de la canasta europea, alza de nuevo la Euroliga.

Mientras tanto, el baloncesto español, con su selección sénior masculina, con las valientes chicas de la selección femenina, con destacados jugadores en la NBA, con jóvenes talentos envidiados por todos y con el deseo de organizar el Mundial 2014, para lo cual ya ha presentado una candidatura oficial, mira al futuro.

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