Según la ONG, 33 "mártires civiles" fallecieron en Deraa, en el sur, 27 en la localidad central de Homs, uno en la ciudad costera de la Latakia y uno en Etleb, en el norte.
La organización pro derechos humanos también contabilizó siete miembros de la policía y del Ejército muertos en Homs y Deraa.
Durante la jornada de ayer, decenas de miles de personas desafiaron al régimen sirio en un nuevo "viernes de la ira" en distintos puntos del país.
Varios grupos de la oposición denunciaron que las fuerzas de seguridad dispararon contra los manifestantes y lanzaron gases lacrimógenos para dispersar las protestas.
Ayer, la agencia estatal de noticias Sana informó de la muerte de tres policías en Homs y de cuatro soldados en Deraa por ataques de "grupos terroristas".
Desde el inicio de las revueltas en Siria a mediados de marzo pasado, las autoridades han sostenido que detrás de las protestas populares hay "grupos terroristas".
El viernes anterior, 22 de abril, Siria vivió la jornada más sangrienta de protestas contra el régimen Bachar al Asad, que se saldó con 112 muertos, según cifras de activistas de la oposición.