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Miércoles 04/06/2025
 
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Málaga

El Unicaja cierra la fase regular ante un Joventut al alza antes del desafío del Barça

Ibon Navarro destaca el buen momento del equipo y la dificultad defensiva que plantea el conjunto catalán

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  • Djedovic, preparado para el partido ante Joventut. -
  • El técnico malagueño asegura que aún no piensan en el Barça y pide centrarse en acabar con una victoria
  • La plantilla está al completo, con Djedovic de vuelta y Balcerowski creciendo en la rotación

El Unicaja de Málaga encara este viernes su último compromiso de la fase regular de la Liga Endesa frente al Joventut de Badalona, un rival que llega en buen estado de forma y con aspiraciones de escalar hasta la sexta plaza. El choque, que se disputará en el Martín Carpena, servirá como termómetro para medir el momento real del equipo antes del exigente cruce de cuartos de final del ‘play-off’, en el que ya espera el FC Barcelona.

Ibon Navarro, técnico del conjunto malagueño, ha subrayado la necesidad de centrarse en el duelo contra el Joventut antes de mirar a los culés: “No hemos hablado nada del Barça. Nosotros vamos a hacer nuestro trabajo y la afición también va a querer una victoria ante el Joventut”. El entrenador vitoriano considera que el rival “viene por buena línea, ha ganado cuatro de los últimos cinco partidos” y recuerda que ya les complicaron en la Copa del Rey.

El balance entre ambos equipos refleja la rivalidad histórica: en Liga Endesa se han enfrentado en 80 ocasiones, con un empate total a 40 victorias por bando, aunque con dominio claro como locales. En total, sumando todas las competiciones, se han medido 95 veces, con ligera ventaja para el Unicaja (49-45). Esta temporada, los malagueños se han impuesto tanto en Badalona (75-79) como en la Copa (100-83).

Navarro afronta el encuentro con toda la plantilla disponible, algo que, aunque positivo, le obliga a realizar dos descartes. “Es una ventaja para tener un punto de tensión adecuado y elegir las piezas correctas”, señaló. Uno de los focos estará en el regreso de Nihad Djedovic, que ya volvió ante el Hiopos Lleida tras casi dos meses lesionado. “Sumamos un soldado más”, sentenció el técnico.

Prepararse sin mirar más allá

Más allá del resultado, el encuentro servirá para ajustar piezas y medir el nivel de intensidad antes de medirse al Barça, un reto mayúsculo que exige la mejor versión del equipo. Aunque la cuarta plaza ya está asegurada, Navarro insiste en no relajarse: “Nunca sabes si es bueno o malo acabar ganando, a veces perder te pone en alerta… aunque el Barça ya nos va a poner en alerta suficiente”.

Uno de los aspectos tácticos clave estará en la defensa interior, especialmente frente a los pívots del Joventut, Ante Tomic y Artem Pustovyi. “Nos generan muchos problemas con sus caídas a canasta y esas situaciones en las que sellan y ganan la zona a nuestros interiores”, explicó Navarro. En ese sentido, el trabajo de jugadores como Kravish, Lima o Guerrero será fundamental para contener el juego interior visitante.

El crecimiento progresivo del pívot polaco Olek Balcerowski también es una nota positiva para el cuerpo técnico. “Se sintió cómodo, le salieron bien las primeras acciones y disfrutó en la pista. No hay que esperar que mañana lo haga igual o mejor, está en proceso”, valoró el entrenador, satisfecho con la evolución del joven interior.

El buen nivel competitivo del equipo se reflejó en el reciente triunfo ante el Hiopos Lleida, donde varios jugadores mostraron un punto de forma ascendente. La rotación amplia y la profundidad del banquillo permiten a Unicaja mantener la exigencia sin desgastes excesivos, algo clave en el tramo decisivo de la temporada.

El regreso de Djedovic ha sido un refuerzo silencioso pero valioso. Su experiencia y capacidad para aportar en ambos lados de la cancha lo convierten en una pieza estratégica en el ‘play-off’. “No nos sorprendió su nivel, llevaba días entrenando muy bien. Es importante por lo que transmite al grupo”, apuntó Navarro.

El Joventut, por su parte, llega al Carpena con la urgencia de sumar para asegurar una mejor posición de cara al cruce de cuartos. Su rendimiento reciente lo avala y su plantilla, con piezas experimentadas y jóvenes talentos, representa una amenaza seria para cualquier equipo del campeonato.

Para Unicaja, la consigna es clara: competir con intensidad, evitar lesiones y terminar la fase regular con una victoria que sirva de impulso moral. Después, llegará el momento de mirar al Barça y soñar con unas semifinales que no serán fáciles, pero sí posibles si el equipo mantiene la línea ascendente mostrada en las últimas semanas.

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