En silla de ruedas y con su pierna derecha escayolada -sufre un esguince debido a un accidente doméstico-, la madre del Cuco contestó vágamente a las preguntas de los letrados. A pesar de no recordar la mayoría de los detalles, la madre del Cuco asegura que cuando el 25 de enero de 2009 ella y su marido llegaron a casa después de tomar unas copas su hijo “estaba en casa”. Rosalía G. M. afirma que llegaron al domicilio entre las 01.30 y 02.00 horas y que entró en la habitación de su hijo para comprobar si estaba o no. “No pude hablar con él porque estaba dormido.
Le di un beso, cerré la puerta de su dormitorio y después me fui al mío”, explicó, al tiempo que indicó que no lo volvió a ver hasta el mediodía. Con respecto a las llaves del Völkswagen Polo de su propiedad, que supuestamente, según la versión de la Fiscalía, fue utilizado para trasladar el cuerpo de Marta, Rosalía G. M. señaló primero que no recordaba bien dónde las dejó esa noche, para a continuación explicar que las guarda en el mismo llavero en el que están las llaves de la casa, que siempre las deja en la entrada y que al día siguiente tanto las llaves como el coche estaban en el mismo sitio dónde las había dejado. Por el contrario, no pudo precisar si las podrían haber cogido por la noche sin que ella se diera cuenta.
Rosalía G. M. también indicó que fue ella quien, días después del crimen, llamó a su marido para que mandase a Samuel y a su hijo limpiar el coche -lo aspiraron-, algo que reconoció que no les había solicitado “nunca” antes. Por otro lado, manifestó que “una voz” masculina le amenazó por teléfono para que “no contara nada de los hechos” y que su hijo no declaró libremente ante la Policía y en el juzgado, y que contó “lo que los policías le indicaban que tenía que decir”.
Asimismo, admitió que avisó a su hijo “para que tuviera cuidado porque los teléfonos estaban pinchados”, aunque lo hizo “sin ninguna intención”.
Otro testigo asegura haber visto a Marta
José C. C, marido de Concepción J. R. que declaró el martes, coincidió con su esposa en que vieron a Marta del Castillo en el portal de su casa a las 21.15 horas del día 24 de enero de 2009, manifestando que no tiene “ninguna duda” de ello. Esta versión contrasta con la de otras dos vecinas que el martes reconocieron poder estar equivocadas al respecto.
Una mujer se encontró con ellael 26 de enero
Uno de los tetigos de ayer, Mª del Mar O. R, señaló haber visto a Marta con vida el 26 de enero de 2009 -dos días después de los hechos-. Esta mujer, que se encontraba trabajando en el Hotel Plaza de Armas, indicó que vio a la joven en los soportales del hotel llorando desconsoladamente, aunque admitió que no lo puede asegurar al 100% si no al 50%.
El tribunal anuncia el lunes si declara el taxista
El tribunal que enjuicia el caso por la muerte y desaparición de Marta del Castillo anunciará el lunes, tras “un estudio en profundidad”, si admite la petición de la Fiscalía para que declare como testigo el taxista que señala que trasladó la madrugada del día 25 de enero de 2009 al hermano de Miguel Carcaño desde Luis Montoto hasta León XIII.
Al inicio de la sesión de ayer -la decimocuarta del juicio oral-, el fiscal del caso, Luis Martín, pidió la declaración de este taxista, así como de la mujer de éste, alegando para justificar la testifical de la cónyuge “como corroboración periférica” para dar “más credibilidad” al testimonio del taxista.Asimismo, en el escrito presentado ante el juez y las distintas partes después de que hayan concluido las diligencias de investigación, la Fiscalía ha solicitado la declaración de Juan A. B. , el joven que sustituía algunas veces a Fracisco Javier Delgado en el bar que éste regentaba; y a Khaléd M. I, el hombre que le atendió en el local dónde supuestamente el taxista, F. J. A. B, compró aquella noche los kebabs.
Al terminar las testificales de ayer, las distintas partes se pronunciaron al respecto de la solicitud de la Fiscalía. Mientras que la acusación particular y la defensa de Carcaño señalaron no oponerse a dicha petición, las demás defensas la rechazaron al considerarla “extemporánea”. Así, el abogado de María García, José Antonio Salazar, señaló que “no va a suponer una “alteración sustancial” del delito de encubrimiento y que conllevará “una contaminación de todo el procedimiento”.
Por su parte, el defensor de Delgado, José Manuel Carrión, indicó que esta “prueba sorpresiva” comprometería la “imparcialidad del tribunal” y que el nuevo testigo no es lo previsto según la ley al respecto a las “revelaciones inesperadas” a las que se quiere acoger la Fiscalía. Por último, el abogado de Samuel, Manuel Caballero, sostuvo que las afirmaciones del nuevo testigo son dudossa ya que ha tardado tres años en declarar.
“Hoy se ha olvidado de todo porque hoy no cobra”
Los padres de Marta del Castillo esperan que el juez acepte que la próxima semana declaren como testigos las cuatro personas que ha propuesto la Fiscalía porque son “cruciales”, ya que uno de ellos trasladó supuestamente a Francisco Javier Delgado a León XIII en la noche de los hechos.
El padre, Antonio del Castillo, ha mostrado su confianza en que el lunes el juez admita a los testigos porque le parecen “muy importantes”. También ha resaltado que las defensas de María García y de Samuel Benítez se hayan opuesto a que se acepte a estos testigos, porque “han saltado como fieras”, y que parece “que les molesta mucho que esta persona venga a decir lo que ha visto o lo que pasó”.
Sobre la declaración de la madre del Cuco, la madre de la joven, Eva Casanueva dijo que “se le ha olvidado todo” porque “hoy no cobra”, y resaltó que hay cosas “incoherentes” en su testimonio.Casanueva también se ha mostrado esperanzada en que se lleven a trámite estos testigos y que se le pueda escuchar porque parece que da “un poquito de luz en el camino”.
Sobre la madre del Cuco, Casanueva ha dicho que la ha visto “nerviosa” y que para no decir mentiras ha estado “muy olvidadiza”, de forma que de aquello de lo que antes había dado una versión “ahora no se acuerda o no está segura”, por lo que considera que la declaración “la retrata por sí misma”.Ha asegurado que cuando la han visto han sentido “mucha impotencia” porque han tenido que aguantar muchos sentimientos y explicó que “en un momento dado puedes apoyar a tu hijo en algo que haya hecho, pero no encubrirlo y manchar una investigación”.