El Grupo Municipal Socialista muestra su "más absoluto rechazo al maltrato que el Gobierno del PP está dando a los trabajadores municipales, a los que está sometiendo a una tortura psicológica que está creando un clima de crispación sin precedentes en la historia democrática de esta ciudad". El PP "actúa desde el ordeno y mando, la imposición y el desprecio a las reglas más elementales de la democracia, ya que ningunea y desprecia a los trabajadores municipales, a los representantes sindicales y a los grupos de la oposición", denuncian los socialistas.
"La muestra más palpable se ha producido en la jornada de hoy, donde los representantes del Gobierno municipal y la propia alcaldesa se han negado a dar la cara ante los representantes sindicales para presentar el ERE que afecta a 390 trabajadores municipales, un ejemplo más de la cobardía con la que el PP actúa en esta ciudad y una falta de respeto total hacia los legítimos representantes sindicales de los trabajadores", exponen. "En lugar de dar la cara, el PP se ha escondido y a la misma hora a la que habían citado a los sindicatos para presentar toda la documentación del ERE convocaba una Junta de Gobierno Local para aprobar de forma unilateral, “por decreto”, sin consenso y sin negociación previa, una RPT (Relación de Puestos de Trabajo) que está plagada de supuestas irregularidades, así como la modificación parcial del convenio colectivo del Ayuntamiento, en la que se eliminan pluses, productividades y ayudas sociales", apostillan.
El Grupo Municipal Socialista asegura que es consciente de la necesidad de que se tenga que producir una reordenación de los Recursos Humanos en el Ayuntamiento, "pero ello no implica necesariamente la aplicación de un despido colectivo y seguimos apostando por la estabilidad de la plantilla, por el diálogo y la negociación con los sindicatos para aplicar ajustes no traumáticos y desde una sensibilidad social que el Gobierno del PP no está demostrando en absoluto".
El Grupo Municipal Socialista solicita al Gobierno municipal y a la alcaldesa García-Pelayo que reconsidere la decisión de acometer despidos colectivos, "máxime cuando se están produciendo severos ajustes por parte del Gobierno central, con la rebaja de sueldos, en las prestaciones por desempleo, entre otras medidas gravísimas para los trabajadores".
