El concejal de Empleo Economía, Fiestas Mayores y Turismo del Ayuntamiento de Sevilla, Gregorio Serrano (PP), ha atribuido este martes a la postura "dogmática y radical" de IU-CA el acuerdo adoptado por el Consejo Andaluz de Comercio para que la liberalización de horarios promovida por el Gobierno central para el sector del comercio se limite, en el caso de la capital andaluza, al entorno monumental declarado Patrimonio Mundial y su zona de amortiguamiento durante Semana Santa y el mes de abril, decisión que rebajaba la propuesta inicial del Consejo Municipal de Comercio.
El Ayuntamiento de Sevilla, como es sabido, había aprobado en el seno de su Consejo Municipal de Comercio, por unanimidad del Gobierno local, la federación provincial de comerciantes Aprocom y la Confederación de Empresarios de Sevilla (CES), una propuesta de desregulación de horarios comerciales para que todo el casco histórico gozase de libertad de horarios desde noviembre de un año a abril del año siguiente o la finalización de la Feria de Abril.
ACUERDO EN EL CONSEJO ANDALUZ
El Consejo Andaluz de Comercio, por mayoría de sus miembros, aprobaó no obstante que esta liberalización comercial se limite al periodo de Semana Santa, desde el Domingo de Ramos al Sábado Santo ambos incluidos, junto con el mes de abril, toda vez que la medida regirá en el entorno y la zona de amortiguamiento de la Catedral, los Reales Alcazares y el Archivo de Indias, monumento declarados Patrimonio de la Humanidad en 1987. El ámbito de la desregulación, así comprende prácticamente la mitad del casco histórico y un sector de Triana.
Dado el caso, Gregorio Serrano ha atribuido este "bloqueo" a la propuesta nacida en el Ayuntamiento a la posición "radical" de IU-CA en este asunto, toda vez que la federación de izquierdas ostenta las competencias relativas al comercio desde la Consejería de Turismo y Comercio. Serrano ha defendido que la propuesta aprobada por el Consejo Municipal del Comercio contaba con "el respaldo de la totalidad de los comerciantes", pero "IU nos la ha tumbado por sus intereses partidistas, sus ideas preconcebidas y dogmáticas y su posición radical". Del mismo modo, ha avisado de los efectos de este conflicto en materia de empleo, pues a su juicio la liberalización de la apertura de los comercios tendría efectos positivos en el mercado laboral.
