Varias asociaciones de automovilistas han celebrado el aumento a 130 km/h del límite de velocidad para automóviles en algunos tramos de autopistas y autovías, porque entiende que de esta manera se acaba "el café para todos" que regía el actual reglamento de circulación.
Así, el presidente de los Automovilistas Europeos Asociados (AEA), Mario Arnaldo, ha criticado que, a día de hoy, los límites respondían a "situaciones genéricas que obedecían a razones de simplificación del control de velocidad" por parte de los policías.
En cualquier caso, ha resaltado que resulta "inquietante" que se otorgue la potestad de fijar el límite de velocidad por tramos a los jefes provinciales de tráfico, lo que podría conllevar "un reino de taifas". "No son los que han construido ni diseñado la carretera y esa competencia correspondería en todo caso a la nueva figura del auditor de carretera", ha explicado.
Por su parte, el director de Seguridad Vial del Real Automóvil Club de España (RACE), Tomás Santa Cecilia, ha asegurado el anteproyecto se trata de un reglamento que "está bastante bien y responde a diversas demandas" como la gestión "dinámica" de la velocidad variable.
"La subida es un gran avance que va a posicionar a España en materia de seguridad vial. El tráfico no se comporta a la misma manera en horarios diferentes, es asimétrico, dinámico, y la normativa tiene que adaptarse a las demandas del momento", ha señalado Santa Cecilia.
Por otro lado, la asociación Dvuelta considera que la iniciativa legislativa supone una "ensalada" de límites de velocidad, al tiempo que demuestra que la Dirección General de Tráfico (DGT) "traslada su confusión a los conductores sobre qué hacer para reducir la siniestralidad vial".
"La profusión de globos sonda acerca de los límites de velocidad tiene el objetivo de tratar de contentar a un amplísimo sector de los conductores que, como la DGT, saben que los actuales, en autopista y autovía, no son ni creíbles ni defendibles; mientras, la indecisión sólo sirve para amplificar un mensaje claramente pernicioso: los límites de velocidad se implantan por razones absolutamente ajenas a la seguridad vial y, no lo olvidemos, a la movilidad", ha aseverado.
LOS RADARES, "UN CACHONDEO"
Respecto a la posibilidad de suprimir los radares, Arnaldo ha lamentado que se haya producido "una reforma cada año" en este apartado, lo que, a su entender, supone "un cachondeo". El dirigente de esta asociación ha afirmado que "exigirá responsabilidades" tanto al Gobierno como a los grupos parlamentarios por esta propuesta.
"¿Qué hay detrás de esto? Es un cachondeo, habrá que empezar a exigir responsabilidades del Gobierno y de los diputados. Además, no se podrían prohibir, sino que habría que modificar la ley. Hace cuatro años estaba prohibido, tres años se toleró...", ha explicado.
