Las casi 400 trabajadoras de Acasa, concesionaria de ayuda y asistencia a domicilio, completaron ayer “sin incidencias” su primera día de los tres de huelga que han convocado para reclamar sus salarios impagados pese al anuncio de un nuevo ingreso de 700.000 euros realizado por la Junta. Tras consultarlo con las empleadas, el comité de empresa, decidió mantener los paros al considerar que, por la experiencia de otros casos, el dinero tardará “como mínimo” una semana en llegar a sus cuentas bancarias.
No obstante, como explicó la presidenta del comité, Encarni Barrios, los servicios mínimos del 33 por ciento decretados por la Consejería de Innovación de la Junta -que coincide con los propuestos por los trabajadores - garantizaron y lo seguirán haciendo hasta el miércoles la asistencia al colectivo de los “grandes dependientes, es decir, los del grado 2 nivel 3 como son encamados así como el apoyo a la ingesta.
En este sentido, aunque el número de dependientes salpicados por este conflicto supera las 800 personas, unas 300 sí están siendo atendidas conforme a estos servicios mínimos. Tanto el Ayuntamiento como el sindicato de CCOO se atribuyeron ayer el “éxito” de las gestiones realizadas estos últimos días para “forzar” un ingreso de la Junta, encargada de financiar la mayor parte del servicio. El sindicato, además, instó a la empresa a que destinara este montante “de manera íntegra” al pago de las nóminas pendientes “y no a otras deudas”.
Al mismo tiempo, responsabilizó también al Ayuntamiento, al asegurar que una parte importante de la resolución del conflicto está en su tejado si se decide a rescindir el contrato con Acasa, que lleva manteniendo desde verano a partir de prórroga, y rescata el servicio. Por su parte, desde el Ayuntamiento explicaron que la transferencia cubrirá una parte importante de los pagos pendientes, dejando 2012 prácticamente finiquitado, con lo que ahora quedaría por pagar unos 2.462.593,27 euros, entre parte del segundo semestre de 2012 y el nuevo ejercicio.
