Una cuadrilla de cargadores de San Fernando, comandada por Francisco Martínez Hurtado, fue el Viernes Santo a cargar los pasos de la cofradía de la Expiración de Ceuta. Y el resultado no ha podido ser mejor. Tras un viaje desde San Fernando a Ceuta,muy animado y con toda la ilusión del mundo, fueron recibidos con los brazos abiertos por la junta de gobierno de la cofradía de la Expiración ceutí.
Después de pedirles por favor que la cuadrilla fuera fiel al estilo de carga de La Isla, los miembros de la cuadrilla, amarraron sus almohadas. Con el Himno Nacional se hizo la salida, para seguir con dos marchas como, Pasa la Soledad y Mi amargura.
Tras dos trepás de trámite, los pasos entraron en Carrera Oficial escuchando 6 marchas y toda entera realizada de una sola trepá, consiguiendo grandes reconocimientos por todo el transcurso de la misma.
Una densa lluvia sorprendió a la cofradía, por lo que tuvo que retornar en la mayor velocidad posible al templo. Obteniendo reconocimientos y apoyo del pueblo Ceutí.
Salieron del paso y los hicieron sentir como los mejores con aplausos y felicitaciones, tanto que a la llegada al hotel dondedormían fueron recibidos también con un fuerte aplauso. En palabras de los cargadores “hemos intentado dejar el estilo de carga de San Fernando lo más alto posible y creemos que se ha conseguido”.
Algunos de los cargadores que se pensaron muy mucho ir a Ceuta, aseguran ahora que no se lo pensarán si regresan el próximo año, porque la experiencia ha sido muy agradable.
Tanto ha sido, que la propia cofradía ha enviado una carta al Ayuntamiento isleño felicitandólo y animándole a que la ciudad sienta orgullo por esta cuadrilla de cargadores, formada con cargadores de otras tantas cuadrillas isleñas.
La carga de La Isla, que tantos debates levanta dentro y fuera de San Fernando, sigue triunfando allí por donde va y donde la intentan imitar, como ocurre cuando las cuadrillas isleñas dejan de ir.
La cofradía ceutí ha destacado “ la entrega, el corazón y el sentimiento que, durante todo el acto procesional llevaron a cabo, siendo de especial consideración por los devotos y público asistente, que lo hicieron patente, a través de la salva de aplausos que recibieron en las clásicas levantás”. Asimismo mostraron su “mayor reconocimiento y agradecimiento al grupo de cargadores isleños que acudieron de forma desinteresada.
