El Ministerio del Interior hará el próximo año un importante esfuerzo inversor para mejorar el control de los puestos fronterizos y agilizar el tránsito, así como para controlar los flujos de inmigración irregular o el tráfico de drogas.
Así lo ha manifestado el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, en el pleno del Congreso en el debate de los presupuestos de su departamento para 2015, que ascienden a 8.174 millones de euros, con un alza del 1,82 por ciento.
Entre las partidas del capítulo de inversiones, el ministro ha resaltado los que se destinarán a implantar el sistema de control automático de fronteras, ya desplegado en los aeropuertos de Madrid, Barcelona y Málaga, en los de Girona, Alicante, Tenerife Sur y Palma de Mallorca, así como en el puerto de Algeciras.
También se invertirán 3 millones de euros en el aeropuerto de Gran Canaria y en el paso aduanero de la Línea de la Concepción (Cádiz) para que haya dos puestos de entrada y otros dos de salida a fin de agilizar el tránsito de personas.
Para la adecuación de los pasos fronterizos de El Tarajal, en Ceuta, y de Beni Enzar, en Melilla, se destinarán 2,5 millones de euros, mientras que al Sistema Integral de Vigilancia Exterior (SIVE) se le dotará con 5 millones (casi el triple más que este año) para modernizar estos sistemas de detección instalados en las costas, sobre todo los más antiguos: los de Las Palmas, Almería, Cádiz y Huelva.
Con un presupuesto de 5.700 millones para gastos de personal, Interior quiere que el próximo año la tasa de reposición en la Guardia Civil y en la Policía sea del 50 por ciento frente al 10 por ciento de los últimos años.
Fernández Díaz ha resaltado la "excelente labor" de ambos cuerpos a pesar de los ajustes en sus salarios y en sus medios por la crisis económica.
Una excelente labor, ha dicho, que tiene su reflejo en tres indicadores: el descenso progresivo de la tasa de criminalidad, que está ahora en 44,6 infracciones penales por cada mil habitantes; que solo un 2,9 por ciento de los ciudadanos considere la inseguridad ciudadana como un problema principal, y que la Guardia Civil y la Policía sean las instituciones más valoradas por los españoles.
De las inversiones previstas para 2015, el ministro ha citado los 35,5 millones de euros para obras de mejora en comisarías y casas cuartel.
Respecto a las indemnizaciones a las víctimas del terrorismo, Fernández Díaz ha explicado que en este ejercicio ya se han concedido 78,5 millones de euros después de las dos ampliaciones de crédito que ha habido que hacer por un total de 60 millones tras la entrada en vigor del Reglamento.
En la defensa de sus enmiendas, el diputado del PSOE Antonio Trevín ha reprochado a Interior las plantillas "menguantes" y los recursos "escasos" para las fuerzas de seguridad del Estado, y ha asegurado que se camina hacia el principio de "quien quiera seguridad, que se la pague".
Tras insistir en que el Gobierno del PP le da "muy poca importancia" a la seguridad, Trevín se ha referido a las plantillas en Ceuta y Melilla y ha dicho que han bajado un 4 por ciento, por lo que ha pedido, como figura en una de sus enmiendas, aumentar al menos en un 50 por ciento el número de agentes de ambos cuerpos en las dos ciudades autónomas.
Mientras, Ricardo Sixto, de la Izquierda Plural, ha exigido la dimisión "urgente y necesaria" del ministro, a quien ha censurado la celeridad con la que quiere tramitar la ley de Seguridad Ciudadana para legalizar las "devoluciones en caliente" y para "criminalizar la protesta".
Rosa Díez, de UPyD, ha recordado al ministro que cuando estaba en la oposición apoyó con ella enmiendas para pedir la homologación salarial de guardias civiles y policías nacionales, no solo entre ellos, sino con los agentes autonómicos y locales.
Para la portavoz de UPyD, se trata de una "asignatura pendiente" de la democracia. "No puede ser que mejorar la eficacia policial solo sea a costa de los trabajadores de la seguridad", ha enfatizado.