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Sábado 23/11/2024
 
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Rajoy y Merkel analizan la crisis migratoria al inicio de su cumbre

Si hace un año Merkel fue invitada por Rajoy a recorrer en Galicia parte del Camino de Santiago, la canciller ha devuelto la invitación al jefe del Gobierno citándole el último día de agosto en el castillo de Meseberg, situado a casi 70 kilómetros de Berlín

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  • Rajoy y Merkel. -

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y la canciller alemana, Angela Merkel, iniciaron hoy su cumbre de dos días con una conversación en la que hablaron, entre otros asuntos, de la crisis migratoria que sufre Europa.

Si hace un año Merkel fue invitada por Rajoy a recorrer en Galicia parte del Camino de Santiago, la canciller ha devuelto la invitación al jefe del Gobierno citándole el último día de agosto en el castillo de Meseberg, situado a casi 70 kilómetros de Berlín.

Un lugar que el Gobierno germano tiene destinado a casa de huéspedes de destacados dirigentes internacionales y cercano al lago Huwenow, con un perímetro de seis kilómetros que recorrieron los dos jefes de gobierno durante algo más de una hora.

Rajoy llegó a Berlín en un avión de la Fuerza Aérea Española y desde allí se trasladó en coche al castillo de Meseberg, donde la canciller había llegado en helicóptero veinte minutos antes.

Tras un primer saludo, ambos cambiaron su indumentaria para dar ese paseo de algo más de una hora en torno al lago en el que, según fuentes del Gobierno español, hablaron "de todo".

Entre otros, de la crisis migratoria en la Unión Europea (UE), una cuestión ante la que los periodistas preguntaron a Rajoy, mientras posaba con Merkel al inicio de su paseo, si España estaría dispuesta a aceptar cuotas obligatorias de refugiados.

Rajoy emplazó a los informadores a hablar de ello mañana en la conferencia de prensa que ofrecerá junto a la canciller, aunque admitió que ya habían empezado a comentar este asunto.

Horas antes, en rueda de prensa, Merkel avanzó que el plan conjunto que Alemania y Francia presentarán a sus socios en los próximos días para hacer frente a este problema migratorio incluirá cuotas entre los países de la UE.

Añadió que el plan de Berlín y París está en gran medida "consensuado" e incluye un reparto justo, teniendo en cuenta el volumen de la población de cada país y su fortaleza económica.

La canciller habrá tenido la oportunidad de detallar a Rajoy algunos pormenores de esta propuesta.

España sigue defendiendo una solución integral de la UE al problema de los asilados y recalcando la necesidad de cooperar con los países origen y tránsito de estas personas.

Las fuentes del Gobierno español informaron de que otros asuntos abordados por el presidente y la canciller en la primera jornada de esta cumbre fueron la situación actual de la UE, el momento que vive Siria y el papel de Mercosur.

En el terreno económico, Rajoy expondrá a Merkel la situación española incidiendo en los aspectos más destacados del artículo que firma hoy en el periódico económico alemán Handelsblatt.

En ese artículo Rajoy afirma que las reformas estructurales han conseguido que España pase de ser el "enfermo de Europa" a liderar el crecimiento en Europa.

"La experiencia española muestra que este es el camino hacia el bienestar", añade en este texto que acompaña a otro del diario económico alemán que califica a Rajoy como "el alumno modelo de Europa".

Rajoy y Merkel, tras su paseo en torno al lago, tomaron unas cervezas en un bar situado junto al castillo de Meseberg y el presidente del Gobierno colgó en su cuenta de Twitter varias fotos junto a un comentario el que calificó de agradable el recorrido junto a la canciller y señaló que después tocaba "reponer fuerzas".

Ambos compartirán una cena en el castillo junto a sus colaboradores más directos y mañana un desayuno de trabajo tras el que comparecerán en Berlín en rueda de prensa.

A su término, asistirán a un encuentro empresarial organizado por la CEOE y su homóloga alemana BDI que contará con la participación de empresarios de los dos países, del ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schauble, y de los ministros españoles de Economía y de Asuntos Exteriores, Luis de Guindos y José Manuel García Margallo, respectivamente.

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