A fuerza de ser protagonistas, ya han dejado de serlo. Bueno, este año sí han sido especialmente mencionados porque en vez de llevar la camiseta de la Peña de Costaleros La Ilusión y el pañuelo azul iban con camisa completamente blanca.
Pero José Vicente Rodríguez Gallardo y Manuel Estrada son siempre el centro de atención porque de sus pies movidos al compás de los siglos sale el primer mosto, cada año, cada noche del 7 de septiembre, para su bendición por el director espiritual de la Hermandad de la Virgen de los Remedios, Patrona de Chiclana.
Las Chiclaneras de 2015, mayores y menores, por parejas, llevaron hasta el escenario los primeros racimos de uva, previo ofrecimiento a la imagen de la Virgen en la puerta de la Iglesia de San Telmo.
Luego fueron los presidentes de las peñas de Costaleros Nazarena y La Ilusión, José Gómez y Manuel Soto de la Espada, seguidos por el delegado de fiestas, José Manuel Vera Gómez y el presidente de la Asociación de Viticultores de Chiclana, Manuel Manzano, para cerrar el ciclo el alcalde de la ciudad, José María Román y el hermano mayor de la Hermandad de los Remedios, Manuel Ortega.
El primer mosto salió de los pies de los pisadores minutos después y fue bendecido por el padre Alberto, quien a la postre se dirigió a los menores de 40 años para aconsejarles que beban más vino y menos bebidas de las “raras” porque vino hay para todos “aunque está mal repartido” y “alegra el alma”.
El alcalde de la ciudad, José María Román, tomó también la palabra tras degustar “el primer mosto, que no vino”, deseó que de ese mosto salga un buen vino que es el que producen “todas las bodegas de Chiclana”. “Y de la misma forma que deseamos que el mosto se convierta en buen vino, deseamos que pasen los años malos y comiencen los buenos años para las familias chiclaneras”. Para eso, dijo, es necesario que el esmero que se pone en la elaboración del vino se ponga en el trabajo del pueblo.
Este año hubo otra novedad y fue la presentación de boceto del nuevo manto de la Virgen de los Remedios, que pregonará en su día Antonio González. Fue el designado pregonero quien a su vez presentó al bordador jerezano que lo hara realidad, Fernando Calderón, quien describió el boceto y el significado de cada una de sus figuras.
Antes, Antonio González reconoció que no están los tiempos para dispendios y que por eso el nuevo manto se va a hacer a través de un grupo de personas que quieren dejar ese legado a la hermandad y al pueblo de Chiclana. No en vano el manto que luce la virgen data de los años 30, "por lo que no es una cosa que se hace todos los años". Lucirá en 2016, en el Centenario del Patronazgo que se celebra el año que viene.
El acto finalizó con la actuación de Antonio Alemania y poco después, a las doce de la noche, música de rondalla.
