Según ha podido saber este diario, B.A. podría haber realizado la travesía con el propósito inicial de visitar a su familia en Tánger, y sus datos fueron conocidos desde primera hora por Salvamento Marítimo y Guardia Civil dado que estaba en la lista de pasajeros, lo que descarta sin dejar lugar a duda alguna que viajase en el buque de manera irregular.
El joven, afincado en Francia, iba vestido, en base a los testimonios de los demás viajeros del buque, con una camisa de color anaranjada en el momento de precipitarse a las aguas cercanas a la Bahía de Algeciras.
De igual modo, este diario pudo saber que la Guardia Civil está investigando las circunstancias personales del desaparecido a fin de hallar posibles causas que explicasen un hipotético suicidio.
Dispositivo
Ayer se reanudó con la salida del sol el amplio dispositivo puesto en marcha por Salvamento Marítimo y Guardia Civil destinado a encontrar al joven desaparecido. Sobre las 8.15 horas, llegaba el helicóptero de Salvamento Marítimo, el Helimer 209, a los que se unieron progresivamente el remolcador Luz del Mar y la embarcación Salvamar Algeciras, pertenecientes a este mismo cuerpo de salvamento.
Una patrullera de la Guardia Civil efectuaba igualmente labores de rastreo, al igual que el avión Serviola y un patrullero de la Armada, y los barcos que realizaban su ruta por los lugares donde se ha establecido el dispositivo recibieron el preceptivo aviso a navegantes para mantener el estado de vigilancia. Los radioavisos permanecerán también conectados.
Según explicaron fuentes de Salvamento Marítimo de Tarifa, en base a un estudio de las corrientes en la zona se calculó la deriva que pudo seguir el cuerpo de esta persona desde la superficie del mar, lo que llevó el dispositivo hacia la zona del Mar Mediterráneo desde Punta Europa. Allí era donde estaba previsto que continuase la búsqueda hasta el ocaso.