La experiencia de la conocida empresa arcense dedicada a la producción de mermeladas de calidad, La Cañada del Arriero, y de su gerente, Lola Esquivias, ha servido a más de una decena de jóvenes para conocer los entresijos de la difícil, pero siempre apasionante, aventura del emprendimiento empresarial. De eso se trataba, de incentivar y motivar a los jóvenes a montar su propia empresa partiendo de una idea innovadora. Con estos argumentos, la Cámara de Comercio, con la colaboración de la Diputación provincial de Cádiz a través de su Instituto de Empleo y Desarrollo Tecnológico (IEDT) llevó a cabo una jornada de emprendimiento juvenil en el idóneo espacio que supone el edificio Emprendedores.
La jornada se enmarca en el programa Emprendimiento Juvenil, financiado con fondos europeos y con los del IEDT, cuyo objetivo es mejorar la cultura emprendedora de los jóvenes entre 16 y 29 años que estén inscritos en el programa de Garantía Juvenil.
En el conjunto de la provincia se imparten tres cursos con un potencial de 320 jóvenes que tienen acceso a la formación. Cada curso consta a su vez de tres fases, cuya primera muestra casos prácticos de emprendimiento a cargo de alguna empresa de la zona donde se imparte.
Las siguientes fases son la impartición de clases teóricas y la tutorización del alumno. Esta última característica es la gran novedad que presentan estos cursos, al objeto de que el alumno aprenda lo máximo posible y llevar a la realidad su idea de negocio.
Durante su presentación, la diputada provincial de Empleo y delegada municipal de Fomento en Arcos, Ana Carrera, dejó constancia de la formación como una prioridad para Diputación y “una buena manera de ayudar a los jóvenes a paliar las cifras de desempleo”.
El director del área Internacional, Turismo y Formación de la Cámara de Comercio en Cádiz, Manuel Álvarez, hizo especial hincapié en la tutorización individualizada durante diez horas del alumno porque “no será una formación genérica, sino una forma de que el alumno obtenga los conocimientos que aplicar a su idea de negocio”. En ocasiones, montar una empresa es la mejor manera de entrar en el mercado laboral.
Emprender un nuevo negocio no es un reto fácil, y en ocasiones los nuevos empresarios o autónomos se encuentran con barreras administrativas que ralentizan su propósito, como admite Lola Esquivias. La empresaria de la marca fabricante de mermeladas La Cañada del Arriero tiene la receta del éxito: constancia, esfuerzo y formación. A estos ingredientes hay que sumar la ilusión y la valentía necesarias para llevar a buen puerto un proyecto empresarial. De fomentar estos y otros valores se encargan la Cámara de Comercio y Diputación, empecinadas en formar a una generación de jóvenes que serán los empresarios y emprendedores del futuro.