En el alambre y sin vértigo y sin mal de altura vuelven a encandilar al aficionado que espera expectante ante lo que está por venir. Las miradas se alzan para deleitarse con un equilibrio sensible y emocionante para oír como su niña comienza a andar.
De la ternura, llegó la letra más crítica con el Juan Sebastián Elcano con su desprecio en el formulismo con el alcalde y le endosan que ”tú no representas a Cai”.
No se caen desde lo más alto y eso que tocan el cielo con un repertorio que cautiva a un público que contempla desde la lejanía.