“He dejado de creer en ustedes -en referencia al equipo de Gobierno-, en la justicia y en el Defensor del Pueblo”. Así de tajante se manifestaba Matilde Domínguez en su segunda intervención en el Pleno municipal. Una intervención en la que volvió a recordar que votó a Podemos en las últimas elecciones y ahora “lo lamento”. Esta mujer firmó en varios momentos estar con ansiedad y con tratamiento a causa de la situación que le está tocando vivir.
Acusó al alcalde de ser “sectario” a la hora de aceptar los recortes de las ayudas a las personas con necesidades para vivir, “permitiendo desahucios, manejando las gestiones públicas a vuestro antojo”. Apeló al espíritu del 15 M, que definió como un impulso “fresco” donde había que dibujar un “camino compartido, donde ahora se sustituye la reflexión por la proyección personalizada”.
El Defensor del Pueblo, tras indicarle hace algunas semanas que no había recibido respuesta por parte del Consistorio, el mes pasado le informaba que tras tener los datos del Ayuntamiento la denuncia no prosperaba.
Esta mujer dio nombres de técnicos de servicios sociales durante su intervención en el Pleno del pasado viernes, a la vez que afirmaba que a uno de ellos lo había denunciado por sentirse “humillada y maltratada por el trato que me dispensó”. Añade que incluso se “rió de mí y me preguntó si yo me creía que con la carta del Defensor del Pueblo iba a venir un piso”.
Por esa situación decidió acudir al juzgado de guardia donde presentaba una denuncia por “el trato que me dispensó durante la reunión”, donde también estuvieron otros técnicos del área municipal de Servicios Sociales.
Esta mujer acudía al mismo Pleno hace varios meses para pedir ayuda puesto que se encuentra en un lugar de la lista de demandantes de vivienda muy atrasado, no cuenta con empleo, y tiene muchas dificultades para pagar el alquiler de la vivienda donde reside.
